La conocí siendo yo muy niña, sobre los 10 años más o menos (que sea consciente y recuerde). Quizás antes. Empecé a escondidas, como suele hacerse. En mi cama y bajo la luz de la luna, tomé como amante a Almohada, la guardiana de mis sueños. Juntas, frotábamos nuestras lámparas maravillosas hasta que un Genial orgasmo cumplía nuestros deseos... A veces, la sustituía por alguna muñeca, pero no era lo mismo. Demasiado rígida. Muy poco maleable. Almo se adaptaba a mí y yo a ella. Estábamos recubiertas por el mismo plumaje... Nos "entendíamos" muy bien.
No fue hasta años más tarde que pasé a la fase de los tocamientos. Le dije a mi Querida que necesitaba algo más, que nuestra relación había llegado a su fin. Quería conocerme, descubrirme, saberme, sentirme, amarme...a Mí. No me dijo nada. Ni una lágrima me regaló. Se quedó callada y se puso a dormir. A veces, la echaba de menos y recordábamos viejos tiempos. Jamás me rechazó. No era celosa ni posesiva. Me daba la libertad que sabía que tanto anhelaba... y yo, se lo agradecía.
Me encantan las mujeres, son lo más Bello que "ha parido Dios". Las curvas de su cuerpo por las que perderse. La suavidad de su piel. Los labios con los que besan tus heridas. Los pechos con los que nutren la vida. La seducción de su inteligencia. La sensibilidad de su corazón. La perfección encarnada.
Y luego están las que me enamoran. Las independientes, las brujas, las chamanas, las que no tienen pelos en la lengua, las espontáneas, las auténticas, las lobas, las que no se avergüenzan de ser como son, las que dicen su verdad, las que se levantan porque lo han intentado, las sabias que no dan nada por sentado y todo por sentido, las que no piden permiso para amar, las que pisan fuerte, las de miradas penetrantes, las que te "leen" porque se han leído mucho, las que envuelven su fortaleza en ternura, las que disfrutan del silencio, de su soledad, las que cuando te abrazan te deshacen, las que hacen el Amor aunque sean muy guerreras, las que brillan por su Presencia.
Con Ellas fantaseo. Con ellas mojo mis sábanas. Con ellas mis ojos se quedan en blanco y mis palabras se colorean...
Siempre he hablado de sexo, de masturbación, sin tapujos. Para mí es algo natural, como comer, como beber, como caminar. A muchas personas les escandaliza. No sé por qué si es un "pecado" que te lleva al Cielo.
Me gusta provocar. Lo admito. Pero es que me parece absurdo que hoy en día, en una sociedad tan "avanzada", aún estemos así, ocultándonos.
Ha habido demasiada represión con este tema. Parece que son los tíos los únicos que se hacen y pueden hacerse pajas. Pues no, nosotras también. Hay muchas mujeres que jamás se han masturbado, que nunca han tenido un orgasmo, que han "heredado esa suciedad" en este acto, esa castración, ese machismo, ese "yo no me lo merezco", lo cual les lleva a rechazar el placer, a tener problemas sexuales con sus parejas y a que les duela el alma y lo que no es el alma...
Hace falta que nos toquemos más y nos empastillemos menos. Lo digo en serio. Yo llevo años haciéndolo. Una buena paja antes de dormir y te quedas como nueva. ¡Adiós al insomnio! A veces lo hago por aburrimiento. No sé qué hacer... Ummm... Me voy a masturbar. Y tan contenta.
Otra Creencia es que si tienes pareja debes dejar de masturbarte. ¡Tonterías! El "apretón", las ganas, la apetencia, el "porque me da la gana", te entra cuando te entra y si el otro, la otra, se ofende... es su problema (y de verdad), no el tuyo.
¿Qué haces cuando tienes hambre? ¿Le dices a tu estómago que espere a que aparezca alguien que te sacie o te "cocinas" tú? Pues eso. Autonomía.
No hay técnicas. No hay reglas. Hablando de reglas... ¡Con ella también se puede! Eso de que con la regla no, es o una creencia más o una excusa. Es una cuestión de ir acariciándose, descubriendo los puntos, la manera, el ritmo, los lugares que te dan más placer. Cada una tiene los suyos. Es algo muy personal. Cada una tiene su camino y lo importante es éste, no el destino (aunque en este caso, es un paraíso). Pero si no lo alcanzas, no pasa nada porque habrás disfrutado en el "durante".
" CUANDO DEJAS DE BUSCAR, ENCUENTRAS "
A mí me pasó hace unos días. Me compré hace poco un juguetito (otro tema tabú ilógico) que me ha llevado a tener por primera vez una eyaculación, alias Amrita para l@s tántric@s. Sí, las mujeres también eyaculamos. ¡Fue genial! Es un vibrador multiusos: para la penetración, estimulación del punto G y el clítoris. Hace un movimiento de "entra y sale" giratorio que parece que esté bailando el reguetton. Lo llamo Regue. Es mi nuevo amante...
Pues estaba ahí toda "puesta", clitorianamente hablando, cuando me dejé llevar, fluir, sin control, y un chorro de líquido transparente, inoloro, salió de mi vagina, mientras orgasmo me hacía una visita. Me emocioné tanto que se lo conté a mis Family Friends por whatsapp.
Es como una pequeña explosión. Abres el grifo y sale agua. Hay una sensación antes como si te fueras a mear que puede hacer que contraigas los músculos "por si acaso". Eso evita que lo tengas. Os animo a todas a que probéis, a que no intentéis contenerlo, a abriros a lo desconocido. ¿Qué puede pasar? Y también, a poner algo absorbente debajo si no queréis que se os inunde la casa...
Había leído que se lograba estimulando el punto G. En mi caso, ha sido, es, a través del clítoris. Por eso, lo mejor es que practiquemos con nosotras mismas, que nos experimentemos, que no hagamos caso a lo que dicen ni a "las escrituras". No hay correctos ni incorrectos. Ni tampoco maestros externos. Pueden servirte de guía, pero ya está. Sólo tú sabes lo que es mejor para ti. Sólo tú puedes conocerte, "iluminarte" y averiguar tu Verdad.
Estamos aquí para gozar de todo lo que la Vida nos ofrece. Y una de esas cosas es nuestro cuerpo. Tenemos el placer al alcance de nuestra mano (nunca mejor dicho...) y no lo estamos utilizando porque nos han hecho Creer, porque nos hemos Creído, que es algo indigno. Lo hemos reprimido, ensombrecido, metido en el cajón de los vicios, de las culpas. Lo hemos enterrado para no verlo. ¿Y sabes qué pasa cuando encierras algo que no puede morir? Que se pudre, sufre, huele mal y se corrompe...
¡Basta ya de tanta Mordaza! ¡Que nuestros órganos sexuales no han sido creados únicamente para parir!
MUJER, TÓCATE... todo lo que puedas y más. Date... rienda suelta. Gime, jadea, ábrete bien de piernas, de mente y de corazón, empápate de tu elixir, cuélate por todos tus agujeros, bebe tu sabor, quédate sorda con tu voz, envuélvete de tu Amor. No permitas que nadie te haga sentir sucia por eso, principalmente tú misma.