Revista Opinión

¿Mata la contaminación atmosférica?

Publicado el 02 enero 2020 por Carlosgu82

La OMS desmiente a Díaz Ayuso: “La contaminación mata y la evidencia es abrumadora”

Dice, con respecto a la contaminación del aire, la Presidenta de la Comunidad de Madrid que:

«Nadie ha muerto tampoco de esto. No quiero que se genere una alarma de salud pública, porque no la hay. Madrid es una de las ciudades con mayor longevidad del mundo y con uno de los mejores sistemas de transporte y cada vez se están renovando más calderas y vehículos». Ante estas declaraciones, se le pregunta, desde El País, a María Neira, directora de salud pública y medio ambiente de la OMS, a propósito del tema, respondiendo:

«La contaminación mata. La evidencia es abrumadora desde hace más de 30 años y hay más de 70.000 publicaciones científicas que lo indican. Y no hay ninguna discrepancia o desacuerdo en la comunidad científica», y (con respecto a la declaración de Ayuso):

«No tengo explicación. No lo sé. Desde el punto de vista científico no tengo ningún tipo de explicación. Ni desde el punto de vista social y económico».

¿Qué puede llevar a una dirigente política a afirmar esto en los medios? ¿No tiene un servicio de prensa o asesores que le adviertan de las repercusiones de tales afirmaciones? ¿No tiene sentido común, no sabe que respirar el aire de una ciudad crea problemas de salud e incluso puede causar la muerte? Sí que lo sabe. Lo sabe porque es una persona inteligente, con sentido común, pero también sabe como decir las cosas para que parezca lo contrario a la realidad. Es la no tan nueva forma de hacer política, tergiversar la realidad.

Algunos dirigentes políticos están usando la realidad de la manera que más le convenga, y lo hacen normalmente teniendo la información más que contrastada. Cuando un político afirma que el cambio climático es mentira, que es una conspiración de no se sabe muy bien quien, o dice que el cambio climático actual es debido a procesos naturales y no humanos, lo dice para tergiversar la realidad, para decirle a su votante lo que quiere oír y para evitar tomar medidas que vayan en contra de sus dogmas o creencias (cambiar lo que cree uno cuesta mucho).

Ningún dirigente político quiere que su región o ciudad tenga el dudoso honor de estar en la lista de lugares contaminados y por eso intenta darle la vuelta a la tortilla diciendo cosas como la que ha dicho Díaz Ayuso, que por supuesto no tardará en matizar, si no lo ha hecho ya (pero la semilla ya está puesta). El objetivo de este tipo de comentarios es cuestionar algún paradigma que no te beneficie de algún modo. Cuando Ayuso afirma que la contaminación atmosférica no mata y que no hay por qué causar alarma social está tratando de decirle al ciudadano qué no se preocupe y qué no espere o exija demasiadas medidas para paliar la situación. Dicho de otro modo, sí, se tomarán medidas para mejorar el aire de una gran ciudad como Madrid y su área metropolitana, pero sin pasarse, no vaya a ser que los ciudadanos protesten por no poder circular con su vehículo por el centro de la ciudad.

Esto es una cuestión de dogmatismo político. Si yo creo que la economía no puede ni debe tener factores externos que la perjudiquen de alguna manera, debo oponerme a esos factores externos, como el ecologismo. Se crea entonces una respuesta que si bien puede negar la realidad, lo más recomendable es ponerla en duda, porque así siempre se podrá dar marcha atrás cuando ya no se pueda negar la realidad. Y es en ese punto en donde estamos ahora. El cambio climático, sí pero…, la contaminación atmosférica, sí pero…, etc.

https://elpais.com/sociedad/2020/01/02/actualidad/1577959010_978204.html


Volver a la Portada de Logo Paperblog