Mientras todavía lloraban la muerte de la madre, el hijo era asesinado.
Solo habían transcurrido 72 horas desde que la madre de José López Lay, de 24 años, apodado “Josecito”, había expirado, cuando la familia se enteró de que el joven había sido ultimado de un tiro en la cabeza. El homicidio ocurrió la noche del miércoles en la Vía Domingo Díaz, frente al estadio Bernardo “Candela” Gil o 28 de Diciembre, en Mateo Iturralde, San Miguelito.
La víctima formaba parte del equipo de fútbol de San Sebastián que acababa de disputar un partido amistoso con el onceno Italia, el cual pertenece a la liga distrital.
Testigos informaron que eran pasadas las 9:15 de la noche cuando se perpetró el crimen.
López Lay se cambiaba el suéter frente a la calle y en ese momento el gatillero llegó por detrás y le disparó en la cabeza.
El homicida se retiró en el asiento trasero de un vehículo Mazda 6 gris.
José quedó tendido en la vía y en un auto patrulla de la Policía Nacional fue llevado al cuarto de urgencias del Hospital Integrado San Miguel Arcángel y después transferido al Hospital Santo Tomás, donde falleció.
Perfil
Un hermano de José apodado Witi, había sido asesinado hacía 5 años.
Aquel crimen se produjo dentro de su vivienda, ubicada en el populoso barrio de Boca la Caja, San Francisco. luego de ese episodio violento, José se mudó a San Sebastían.
López Lay era el padre de gemelos de siete años.
Se informó que lo mandaron a matar integrantes de la pandilla “Bagdad” que opera en Boca la Caja.
Irónicamente ayer, su madre recibió sagrada sepultura, 14 horas después de su fallecimiento.