Bolduque (‘s-Hertogenbosch en holandés) está de gran fiesta: se celebra el quinto centenario de Jheronimus Bosch (1450 – 1516), El Bosco. La capital del Brabante Septentrional ha preparado una gran exposición y organizado diversas rutas conmemorativas.
Quizá la presencia permanente más notable del mundo creativo de la época de El Bosco sean las 96 figuras de los arbotantes de la Catedral gótica de San Juan. Músicos y monstruos, animales y oficios, vida cotidiana y fantástica, que nos muestran ese mundo de transición entre el medioevo y la modernidad. En total son dieciséis hileras con seis figuras a horcajadas en cada arbotante. La matemática no puede faltar: al arquitecto geómetra o el medidor ocupan la primera hilera del sur junto al pintor y el albañil.
El museo de la catedral conserva muchas de las estatuas originales que tuvieron que ser sustituidas, y recreadas, hace apenas un siglo.
El geómetra realiza sus diseños con un compás: estrella pentagonal y triángulo inscrito en circunferencia. El medidor utiliza su regla.