(continuación de parte 1:
http://rominamadrid.blogspot.com.ar/2018/01/materialismo-espiritualidad-parte-1.html)
Ambos tipos de personas están identificados. Unos están identificado con las cosas, los privilegios o/y el poder (soy mi auto; soy mi casa; soy mi estrato social; soy mi trabajo; soy poderoso); los otros están identificados con las energías sutiles, con la sensopercepción, y con la diferenciación con respecto a los primeros (yo no soy ése; soy diferente; soy mejor, más espitual).
Es decir que ambos son esclavos de su ego: yo soy ésto. Y como dice Osho en alguna parte: ambos están contando el dinero. Unos cuentan lo que tienen, y los otros cuentan lo que no tienen; pero ambos están contando. Ninguno es libre de poder ser lo que necesiten ser dependiendo de la circunstancia, de ser algo no-identificado pero completo en sí mismo y flexible, acorde al momento.
Por supuesto, éstas no son las únicas maneras de vivir: hay una tercera opción! una en donde ambos mundos están integrados; una en la que la materia y el espíritu van juntos. Puedes ver al dinero como energía en movimiento. El dinero es un sistema de intercambio entre las personas: Yo te pago a ti por un algún producto o servicio y tú con ese dinero compras o inviertes en donde tú lo necesites. Si lo miras de este modo no resulta tan aterrador, verdad?! Además de la energía del dinero, tengo mi energía anímica para ofrecer y LO VALGO. Convengamos que hasta donde tenemos la certeza hay una sola vida (que haya o no haya más vidas no es el punto aquí ni la cuestión ya que no nos suma nada ahora y en definitiva todo es cuestionable) y que no sabemos cuándo será el final de ella, entonces lo que haga momento a momento, SI IMPORTA!
Encontrémosle un sentido a nuestro trabajo y al mismo tiempo encontrémosle un trabajo a nuestro sentido. Esa es la respuesta! Si tenemos inclinación por el mundo material podemos ahora buscarle un sentido, un algo que nos llene espiritualmente también, que mantenga nuestra pasión interna encendida, que tenga vitalidad!; quizás un trabajo acorde a nuestros deseos más profundos de autorrealización, amable con el medio ambiente, armónico conmigo mismo y con los demás seres, un trabajo que deje algo valioso a las próximas generaciones, en cuya tarea pueda aportar y compartir la más pura esencia de lo que soy. Recuerda que de granitos de arena está hecha la playa!!!
Si en cambio, tenemos inclinación por el mundo espiritual (que por cierto es más creativo) podemos buscar la manera de enraizarnos a la tierra, quizás aportando algo de trabajo concreto a la sociedad, o integrar este conocimiento para que sea práctico y al alcance de la vida cotidiana y concreta de las demás personas, o en el caso de que trabajemos en algo relacionado con lo espiritual, de estructurar y ordenar nuestra transmisión de manera de ganar dinero suficiente para vivir una vida abundante, así podremos vivir plenamente y más cómodos, seguir aprendiendo y, lo fundamental, seguir aprendiendo. La verdadera abundancia incluye absolutamente todos los aspectos de nuestro ser!!!
Mientras más abundante sea tu vida, mientras más pleno y feliz te sientas,
más querrás compartir lo que tienes; mientras más compartas lo que tienes, más satisfacción, bienestar y agradecimiento sentirás!! La abundancia es una gran rueda que sale de nosotros y a nosotros retorna, que se enraiza en lo más terrenal de nuestra existencia y se eleva hasta lo más sutil del Ser; se conecta con el gran Espíritu y éste evoluciona también.Pero no me creas, PRACTICALO y EXPERIMENTA!Los dejo con este video humorístico de JP SEARS 😋