Probablemente cualquier ciudad americana tiene un barrio cutre y oscuro a la vez que colorido que no se echa de menos hasta que desaparece.
En Boston, ese barrio era el animado y picante Scollay Square; solo después de que el área fuera demolida en nombre de la remodelación urbanística en los 70`s fue cuando sus garitos Honky Tonks y los antros de bodevil fueron añorados.
En New York en los 70`s los políticos promovieron el adecentamiento de Time Square, pero ahora, el influjo de las grandes cadenas comerciales y los grandes almacenes alrededor de la 42nd street hace que la gente recuerde con nostalgia los buenos, malos tiempos.
La legendaria Maxwell Street en Chicago proxima a la parte oeste (West Side) era uno de esos lugares que a la gente le encanta recordar, un mercado al aire libre para embaucadores y buscadores de gangas, para músicos y predicadores callejeros, para compradores de zapatos, para otros que buscaban salvar almas.
A principios del Siglo XX, la zona cerca de Halsted Street se convirtió en el lugar que los inmigrantes utilizaban para empezar la búsqueda del sueño americano mediante negocios al aire libre y mercadillos, así como restaurantes, tiendas de delicatessens y otros negocios.
Mas adelante fue apodado el barrio judio, en aquellos dias políticamente incorrectos, era una etiqueta tan poco insultante como lo es el barrio chino (Chinatown) hoy en dia.
Mas adelante, los afroamericanos que se mudaron hacia el norte de la ciudad hallarían en Maxwell St un remanso para las actividades comerciales, diversión y música, al tiempo que los cantantes de Blùes y Gospel llenaban la calle con música y redención.
A principios de los 60`s el área de siete manzanas era un efervescente carnaval de toda clase de comercios, legales, ilegales y cuasilegales.
En los 90`s se trasladó el mercado a otra zona para acoger la ampliación de la Universidad de Illinois y una era pareció terminar, muy llorada por los habitantes de Chicago de toda la vida.
Esa era se revive en el documental “And This is Free”, un multipack compuesto por un CD, un DVD y un libro. El DVD contiene varios documentales, siendo el mas destacado el que aquí nos trae, un film rodado en 1964 por Mike Shea, un tributo exquisitamente filmado en blanco y negro sobre el sabor único del famoso mercado. Incluye música de Robert Nighthawk, Johnny Young y James y Fanny Brewer.
Chicken Man
Robert Nighthawk
bluesman desconocidos
Carrie Robinson