Frutta Martorana típica de Sicilia
"Una camarera se acercó con una bandeja de dulces. Kenneth rehusó con un breve ademán y por un momento su mirada se ensombreció al ver la última creación elaborada por las delicadas manos de Laura. Salió de allí camino del vestíbulo y mientras bajaba a toda prisa las escaleras aún veía aquellas miniaturas de mazapán en forma de diferentes frutas. Un despliegue multicolor exquisito y laborioso con el que ella había querido despedirse". DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN, capítulo 14.
La noche de San Valentín de 1920, en el hotel Taormina se celebra una fiesta a la que está invitada la flor y nata de Nueva York. Dada mi afición a incluir dulces con un significado especial en mis novelas, esa vez tenía por fuerza que ser algo muy siciliano. Busqué entre todas las exquisiteces típicas de esa isla un dulce típico acorde con una recepción tan exquisita. ¡Y me llevé la sorpresa de mi vida!
Mocadorà de Valencia, típica de Sant Donís, 9 de octubre
Descubrí que en Sicilia elaboran unas miniaturas de mazapán en forma de frutas y hortalizas, llamadas frutta Martorana, que son exáctamente iguales a las frutas de la mocadorá de Valencia. ¿Las casualidades existen? Desde luego que sí: andaba buscando un dulce siciliano para el día más romántico del año... ¡y me encuentro con una especialidad idéntica al mazapán con que los valencianos celebramos el día de los enamorados!
Así es, no os extrañe, en Valencia el Día de los Enamorados se celebra el 9 de octubre. El día de San Donís se conmemora la entrada del Rey Jaime I en la ciudad. Por tradición, desde hace siglos, maridos y novios regalan a sus chicas un pañuelo que contiene miniaturas de mazapán idénticas a esas sicilianas que Laura elaboró para el San Valentín del Taormina.
Gracias a DELICIAS Y SECRETOS EN MANHATTAN he descubierto que son muchas las similitudes en la gastronomía tradicional que comparten Valencia y Sicilia: los rosegons de almendra y que allí se llaman biscotti quaresimali.
Rossegons
Biscotti quaresimali
La elaboración de vino moscatel y, cómo no, la omnipresencia de naranjas y limones. Tanto Sicilia como Valencia son tierras de cítricos.
Limonero en un azulejo de Caltagirone (Sicilia)
Naranjas en mosaicos Art Decó Estación del Norte de Valencia
Otra coincidencia: su pizza sfinciuni, cuya particularidad reside en que es rectangular, como la típica coca valenciana.
Coca de tomate y pimiento
Pizza sfinciuni
Y cómo olvidar nuestras peladillas y sus confetti di Avola o nuestro turrón y su tradicional torrone. Otra coincidencia repostera es que tanto allí como aquí se fabrica el mismo y singular chocolate terroso.
Turrón y Peladillas
Torrone y confetti di Avola
Puede que todas estas semejanzas se deban al común pasado histórico como parte de la Corona de Aragón, puede que al secular comercio marítimo entre ambas costas o tal vez debamos agradecerlo al pasado árabe que también compartimos. No lo sé, esa investigación es cosa de los historiadores.
Yo las observo como curiosidades de la vida cotidiana, descubiertas por casualidad, y no me resisto a incluirlas como pinceladas en las mis novelas. Ahora que conozco tantas tradiciones hermanas, me pregunto si será por eso que muevo tanto las manos cuando hablo en público.
ÚLTIMA HORA: A petición de Menchu Garcerán y Yolanda Quiralte, ambas excelentes escritoras, golosas y entusiastas reposteras, pinchando AQUÍ accedéis a la receta del Mazapán de la Mocadorá.