My Health Desk, una plataforma española pionera en agrupar a profesionales e instituciones líderes relacionadas con el conejos genético en oncología, me entrevista este mes de Diciembre para su blog.
Léela a continuación:"¿Qué es la psicooncología?
La Psicooncología es una rama dentro de la Psicología Clínica y de la Salud encargada de prestar apoyo y asesoramiento psicológico especializado a las personas que han sido diagnosticadas de cáncer y a sus familiares. Además de labores de investigación, cuidado y asesoramiento a los equipos médicos.
¿Por qué acudir a un psicooncólogo y no a un psicólogo si tengo cáncer?
La razón fundamental es porque somos los profesionales dentro del mundo de la psicología, que conocemos mejor el proceso psicológico, social y médico al que se enfrentan los pacientes y familiares afectados. Manejamos información que se escapa a otros profesionales y que es fundamental para la adaptación del paciente. Conocemos la verdadera magnitud de plantar cara a esta dura enfermedad y sus secuelas. Manejamos los recursos específicos que han de ponerse en marcha para superar un cáncer, la información que deben emplear y las estrategias para superarlo. Una paciente lo definía muy bien con una pregunta: ¿Cuándo tienes un problema de corazón prefieres ir al cardiólogo o al médico de cabecera?
¿Cuáles son los síntomas psicológicos que desarrolla un paciente con cáncer?
Cada persona se enfrentará al cáncer de una manera totalmente propia. Sin embargo, sí que se ha observado que existen reacciones comunes entre los afectados, pudiéndolo dividir en tres grandes momentos de su proceso normal de afrontamiento:
Al principio, lo más habitual es que exista una primera fase de choque y desconcierto. Se producen reacciones de incredulidad, negación del diagnóstico y un sentimiento de gran desesperanza, anticipando dolor y muerte.
Una segunda fase intermedia, en la que aparece una respuesta de disforia. Caracterizada por un gran malestar e irritabilidad, con respuestas de ansiedad tales como anorexia, insomnio, falta de concentración, disminución de la actividad cotidiana, rumiación sobre los tratamientos si serán o no dolorosos y miedo a morir. Se suele manifestar también un sentimiento de preocupación por la familia y depresión por no haber realizado determinadas actividades o proyectos, con el temor y el convencimiento de que ya no se dispone de tiempo suficiente para llevarlos a cabo. En general supone una ruptura con la vida anterior.
Fase de adaptación: la persona acepta la situación, se manifiesta más optimista y pone en marcha mecanismos de afrontamiento, tales como la recogida de información sobre su caso concreto y la reorganización de su estilo de vida.
Estas reacciones emocionales, pensamiento y dudas serán normales siempre y cuando no sean excesivamente intensas o se prolonguen demasiado en el tiempo. Si una de estas condiciones se da, o ambas, es momento de consultar con un psicooncólogo para poder manejar mejor la situación y evitar así dolor emocional innecesario.
¿Qué dudas plantean con más frecuencia?
Es habitual que no vengan con preguntas concretas. Sino que durante las conversaciones que mantienes con ellos vallan surgiendo y recordando qué querían saber. Piensa que la mayoría de las personas consultan motivados por el consejo de un familiar u otro miembro del equipo médico que lo suele ver decaído o enfadado.De tal manera, que se procura saber qué información maneja la persona y se le va facilitando la información que debe conocer para poder manejar mejor la situación.
Por ejemplo, respecto a pacientes diagnosticadas de cáncer de mama, suelen ser frecuentes las preguntas sobre reconstrucción, sobre cómo comunicar a sus hijos la enfermedad, si es normal este o aquel pensamiento o sentimiento que están sintiendo, problemas se sexualidad, efectos secundarios, secuelas de las operaciones en su autoimagen, etc.
Se trata de normalizar la situación facilitándole al paciente la información y recursos específicos de cada etapa de su proceso oncológico para ayudarlas a llegar a esa fase que comentábamos antes de aceptación.
¿Por qué es importante recibir apoyo psicológico durante el tratamiento de un cáncer y qué beneficios aporta al paciente?
La sensación de incertidumbre es una de las peores cosas a las que puedes enfrentar a un ser humano. El no saber qué va a pasar, es algo que descoloca a cualquiera. Y ésta, es la especialidad del cáncer. Los psicooncólogos no sólo estamos para apoyar a las personas que se pueden deprimir o tener trastornos de ansiedad por la enfermedad, estamos para informar y asesorar a todos los pacientes con cáncer y sus familiares para arrojar una luz sobre el camino que ahora se abre y que puedan tomar decisiones sabias sobre su proceso y con calma. Estamos durante todo el proceso, es decir, desde que se sospecha de la posible existencia de la enfermedad hasta la vida después de la misma.
Comprender qué le está pasando ayuda a los pacientes a presentar índices de depresión y ansiedad menores, mejor afrontamiento y adaptación a la enfermedad, mejor relación con el equipo sanitario, etc.Y lo que es mejor, mayor adherencia a los tratamientos. De tal manera que permite que todo fluya con más naturalidad y que la persona pueda adaptarse mejor y más rápido a la nueva situación.
¿Puede resumir el tipo de tratamiento que suele aplicarse en estos casos?
Como en todas disciplinas, “cada maestrillo tiene su librillo”, en mi caso, como terapeuta cognitivo conductual hablo mucho con mis pacientes, les facilito mucha información que siempre debatimos y empleamos técnicas y ejercicios para entender mejor lo que pasa, cómo manejar las emociones y pensamientos negativos, trabajamos mucho la comunicación y así poder superar este proceso y adaptarse lo más rápidamente posible.
¿Es recomendable que los familiares de un paciente también reciban tratamiento psicológico?
Siempre que exista cualquier tipo de duda deben consultar con el especialista oportuno. Les suelo decir a mis pacientes, que sean conscientes de que sus hijos y parejas, se están haciendo las mismas preguntas que ellos sobre la enfermedad y el futuro: “¿me dolerá, podré volver a trabajar, esto estropeará mi relación de pareja, podré volvera…?”; que también sufren el impacto de la enfermedad y que los cambios vitales también les afectarán a ellos. Como decía, siempre es recomendable, aunque la realidad es que el 95% de las consultas las realizan las personas afectadas, las familias suelen mantenerse más al margen o ser el catalizador que propone al afectado acudir a consulta.
Para los familiares los puntos de corte a la hora de plantear cuándo es indispensable consultar con un psicooncólogo son los mismos que para los pacientes: cuando cualquier reacción emocional o pensamiento negativo se mantenga demasiado en el tiempo o sea muy intenso. Por ejemplo: una chica de 17 años, cuya madre padece un cáncer de mama agresivo metastásico y se encuentra en quimioterapia. Manifiesta una rechazo claro a hablar del tema y se niega a aceptar que su madre está enferma, la evita y hace como que no pasa nada. Éste, fue un caso real que tuve la oportunidad de atender, y es un claro ejemplo de la necesidad que muchas veces no se tiene en cuenta, y es que los familiares también sufren la enfermedad de su ser querido intensamente.
¿Qué consejos daría a la hora de enfrentarse al tratamiento quimoterápico y sus consecuencias?
Lo primero es que estén bien informados. Que conozcan las posibles secuelas pero sobre todo, cómo paliarlas; Segundo: comunicar a los demás la situación y solicitar menos visitas esos días; Tercero: pedirle a un miembro de la familia que se encargue de avisar a los demás sobre su estado; Cuarto: anotar todas las dudas y preguntarle a su oncólogo en las sesiones previas que puedan tener con ellos; Cuarto: delegar las responsabilidades de casa al resto de la familia; Quinto: dejarse ayudar; Sexto: pedir ayuda en casa cuando el cansancio haya meya; Séptimo: permítete descansar y darte tiempo para recuperarte de cada sesión: Octavo: desahógate: habla de cómo te sientes con otras personas y descárgate emocionalmente; Noveno: consultar con un psicooncólogo que le ayude a no ver negativamente esta parte del proceso, que la apoye y le enseñe técnicas de afrontamiento para controlar el miedo y la ansiedad que genera enfrentarse a la silla de la quimio; Décimo: recuerda que luchas por y para ti.
¿Qué tipo de actividades debería realizar un paciente a la hora de mantener una buena salud psicológica?
· Hay varias cosas fundamentales para mantener un buen ánimo durante todo el proceso y por lo tanto mantenerse psicológicamente fuerte y son:
· Comunicación, comunicación y más comunicación
· Ejercicio moderado y muchos paseos
· Disfrutar de las pequeñas cosas y del ocio
· Plantearse objetivos realistas e irlos cumpliendo poco a poco
· Aprender a manejar el estrés mediante respiraciones, por ejemplo
· Aprender a gestionar mejor las emociones
· Ser más tolerante consigo mismo y aprender a delegar en los demás
· Pero sobre todo, mucho apoyo social y cariño de los profesionales y familia.
Según su opinión, ¿qué aporta la realización y el resultado de un test genético predictivo de síndromes de cáncer hereditario en una familia? ¿Cuáles son las consideraciones psicológicas a tener en cuenta en estos casos?
En términos generales, enfrentarse a una prueba así, genera mucho estrés y una gran sensación de vulnerabilidad muy desagradable. Habría que hablar de casa familia y personas en particular, aquí no me atrevería a hablar de generalidades. Lo que si está claro es que el impacto emocional de los resultados va a ser fuerte y podría generar cambios familiares drásticos. "
Gracias a los compañeros de MyHealthDesk, especialmente a David Aceituno. Puedes leer la publicación original haciendo clic aquí.
Ariadna González.Psicooncóloga.