Me gusta...saldar una deuda histórica

ME GUSTA
Primero. La deuda no la tenía yo para con nadie, sino que era una deuda que tenía el destino/mundo para conmigo.
Antecedentes.
Hace tres años fuimos de vacaciones a Eurodisney, como es lógico queríamos traer unos recuerdos para nosotros del parque, también como es ilógico queríamos traer unos recuerdos para toda persona viva que conociéramos. Compramos tazas y tazones de desayuno para nosotros, para nuestras familias, amigos, enemigos y gente por la que sentimos absoluta indiferencia, resumiendo...compramos muchas tazas.
Para mí había elegido el que quizás sea el tazón más apropiado. Se trataba de un modelo en el que venía el enanito gruñón de Blancanieves. Por la personalidad de este enanito y por  su belleza interior somos como almas gemelas. ¡Gran taza!.
Origen de la deuda histórica
El problema surgió cuando tras estar repartiendo tazas a diestro y siniestro mi novia quiso regalar unas tazas a los hijos de los vecinos, nos quedaban dos tazas aparte de la mía, pero digamos que había un modelo poco apropiado para un joven en desarrollo por lo que mi novia me miro, luego miro mi tazón, me volvió a mirar, volvió a mirar mi tazón...y así hasta que llego un punto en el que yo ya no podía alegar que no sabía que es lo que pretendía.
Y así fue como el mundo (y con mundo me refiero a mi novia) me dejo sin el mejor tazón del mundo. A cambio tuve que conformarme con el siguiente modelo:
¡Un tazón rosa de Minnie Mouse!. No tengo nada en contra de Minnie, pero una persona que por las mañanas se levanta con legañas en los ojos y odio en el corazón no puede desayunar en un tazón rosa con una ratona sexy. No es apropiado, pero así ha sido durante tres largos años.
Reparación del agravio histórico
Finalmente hace unas semanas pude solucionar el problema al encontrar una taza masculina acorde a mis gustos frikis y dónde se pueda desayunar con la intención de salir de casa para, desde mi posición de contable, salvar el mundo:

¡Mi taza de superhéroes!. Una gran taza con Iron Man, Thor, Hulk, etc...He conseguido cambiar a una ratona nada acorde a mi condición de varón heterosexual por una taza repleta de hombres musculosos, sudados y con mallas de colores chillones....esperen un momento...¿Voy bien en mi argumento?
NO ME GUSTA
En estos momentos de mi vida tengo una duda que hace que no consiga ser completamente feliz. En unos meses vuelvo a Eurodisney...Si la deuda esta saldada, ¿debo buscar la taza del enanito gruñón injustamente perdida en el pasado?¿Es razonable tener dos tazas favoritas?
Anexo: ¡Echo de menos a Minnie!
Anexo 2: En ocasiones desayuno en el tazón de Minnie. En mi interior alego que no hay tazas limpias, pero es mentira...necesito verla.
Anexo 3: Una vez leído los anexos eliminenlos de su memoria, por favor.

¡Oohhh! Es dibujito-gruñón...igualito. Si miran el dibujo detenidamente y en silencio podrán escuchar como Walt Disney se retuerce en su tumba.