Revista Creaciones
Fácil, menos cuando son un montón de rotos sin tela y que miden diez por trece cm y encima en el pantalón de chándal que más le gusta a mi hijo.
Lo que hacía cuando era pequeño, lo de planchar la rodillera, ahora con veinte años no es viable además ¿hay rodilleras tan grandes?
En resumen se quedó al lado de máquina de coser esperando a que a mí se me ocurriera algo.
La solución fue aprovechar los restos de tela del arreglo del largo de otro chándal ,que mira tú por donde, era de la misma tela negra y brillante que el pantalón de mi hijo.Como su pantalón lleva unos adornos de tiras de tela negra uní los trozos del bajo con tiras de remate para llegar a tapar el ancho y largo de los rotos y meter los bordes debajo de la tiras de adorno.
Y a quedado el arreglo como parte del diseño del pantalón, soy estupenda. No lo digo yo, lo dice mi hijo. Ja,ja.Besos.