"Me habría gustado que las personas se pusieran en mi lugar, que lo veo todo desde abajo y lo oigo de distinta manera..."
"Me llamo Lucas y no soy perro" es el último trabajo del periodista Fernando Delgado, publicado por la Editorial Planeta. El autor, amante de los perros, nos presenta esta historia sin grandes pretensiones, donde el protagonista es Lucas, un labrador (en honor a uno de sus perros de la misma raza, con el mismo nombre), que será quien comparta con nosotros su vida.Nos encontramos, por tanto, nuevamente con un narrador perruno. El libro se divide en tres partes, un total de 137 páginas. En la primera, Lucas nos presenta a su familia y nos confiesa sus deseos de convertirse en humano, en un niño y hará todo lo posible para ello. Nuestro protagonista tiene una hermana perruna, Paca, mayor que él y menos activa. Dos hermanos humanos, padres y abuelos. Su vínculo más especial lo tiene con Duli, el peque de la familia que quiere ser perro, y con su madre, que lo adora desde que es pequeño. No sucede lo mismo con los abuelos, con una de las asistentas o con el padre y cabeza de familia, que no le tienen simpatía alguna. Esta primera parte transcurre sin mucha acción, con el sólo objetivo de ubicarnos y conocer a los personajes centrales.En la segunda y tercera parte hay más acción, acompañaremos a Lucas en sus inesperadas aventuras y peripecias cuando aquéllos que no lo quieren intentan librarse de él. Conoceremos a más personajes, y los contrastes entre el amor y el desamor, la pobreza y el confort, la compañía y la soledad, porque "Me llamo Lucas y no soy perro" es una especie de fábula agridulce llena de sensibilidad, emoción y algo de humor, que encierra a su vez una crítica hacia el abandono de los animales. En este sentido, me ha gustado mucho la alusión que se hace en la historia al maltrato de los perros de caza. Ya sabéis la mayoría que tengo conmigo a Enzo y que estoy especialmente sensibilizada con este tema. Al parecer, el autor también es dueño de un galgo y está familiarizado con el problema.
Fernando Delgado
También me ha gustado mucho el comienzo del libro, y es que antes de adentrarnos en la historia, Fernando delgado hace una extensa dedicatoria a numerosos perros que ha conocido, poniendo en segundo lugar el nombre de sus dueños (Elvira Lindo, Ángeles Caso etc.).Y es que, como nos recuerda el autor con su cita de Anatole France al principio de su historia, "hasta que no hayas amado a un animal una parte de tu alma permanecerá dormida".
¿Lo habéis leído? ¿Os llama la atención?