Si, como dice el título de la entada, me resisto. Me resisto a que el verano se acabe... me gusta tantísimo el sol, la playa, los horarios locos... que me resisto a que se acabe, pero también he de confesar que un pelín de rutina, tampoco nos vendría mal. Lo sé, una pura contradicción... pero así soy yo.
Y como me resisto a que el verano se vaya, el otro regalito que preparamos para Ángela por su cumple, ha sido un capazo de playa.
Seguro que algo lo usará aún, pero si no... tendrá un bonito capazo para estrenar el año que viene.
Nos hemos inspirado en la crin de los unicornios, multicolor y muy alegre. Le hemos añadido unas cuentas de madera colgando de cola de ratón multicolor también... Irene y yo hemos decidido que va a ser un "llamador de unicornios".
Ángela disfrutará de él seguro.
Buen Miércoles.
(entrada programada)
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