Revista Economía

Me voy.

Publicado el 01 enero 2020 por Torrens

No era independentista, pero si algún día puedo votar en un referéndum eficaz votaré independencia, pero en ningún caso por nacionalismo catalán sino para dejar de ser ciudadano de un país que es una inmensa estafa, estafa que el Estado español practica cada día con todos sus ciudadanos, en especial con los catalanes, y la profunda estupidez de la mayoría del resto del país se cree las mentiras y apoyan a los estafadores y a la misma estafa.

En mi nota ESPAÑA ESTADO MENTIROSO E INFRACTOR, del 12 de diciembre pasado, denunciaba la inmensa mentira en que está inmersa toda España desde los políticos neofranquistas a la mayoría estúpida de la ciudadanía.

La versión oficial que la mayoría de ciudadanos de España excepto Catalunya se han creído y se han tragado es una inmensa y malintencionada falsedad. Veamos la versión oficial, Catalunya no puede ejercitar el derecho a la autodeterminación y a decidirla, establecido por Pacto de las Naciones Unidas en 1966 y ratificado por el rey Juan Carlos en 1977 tal como publicó el BOE el 27 de abril de dicho año, porque dicho Pacto se refiere a territorios colonizados, por esta razón la Constitución de 1978 lo prohíbe y el Tribunal Constitucional falló en contra de cualquier procedimiento encaminado a iniciar un proceso por el que eventualmente Catalunya podría alcanzar la independencia. A pesar de ello el gobierno independentista de la Generalitat inició tal procedimiento mediante un referéndum ilegal, razón por la que varios políticos catalanes fueron juzgados y condenados a prisión, aunque algunos salieron de España y no fueron juzgados porque se mantuvieron exilados a pesar de que varios países europeos incumplieron las euroórdenes para su detención, además cuando políticos catalanes exilados y uno en prisión se presentaron a las elecciones al Parlamento Europeo y obtuvieron la plaza de diputados de dicho Parlamento, el gobierno de España impidió que ocuparan su plaza pero Europa volvió a traicionar a España cuando finalmente el TJUE falló a favor de los eurodiputados catalanes.

Una vez descrita la descomunal mentira que la estupidez de una mayoría de ciudadanos españoles fuera de Catalunya se ha tragado totalmente convencidos, describo a continuación la verdad, la inmensa barbaridad que en realidad ha cometido el Estado español empujado por la irresponsabilidad de sus gobernantes.  El artículo 1 del Pacto de Naciones Unidas de 1966 está totalmente dedicado al derecho a la autodeterminación y en su apartado 1 deja bien claro que dicho derecho es universal para todos los pueblos y nacionalidades, colonizadas o no, pero además el apartado 3 establece que TODOS los países FIRMANTES de dicho Pacto se OBLIGAN a respetar dicho derecho e incluso a promoverlo, obligación con la que el Estado español ha cometido uno  de sus mayores incumplimientos en acuerdos y pactos internacionales. Pero la barbaridad es todavía peor, porque el artículo 96 de la Constitución de 1978 establece que cualquier pacto o acuerdo internacional firmado por el Estado español que se publique en el BOE, tal como se publicó el Pacto de Naciones Unidas de 1966 en el BOE de 27 abril 1977, se considera que dicho documento forma parte de las leyes fundamentales de España, es decir de la Constitución, y por lo tanto los que han incumplido y continúan incumpliendo dicha Constitución, además mediante falsedades, son los que afirman que prohíbe cualquier procedimiento encaminado a la independencia de Catalunya y los que han decidido que el referéndum del 1 de octubre 2017 era ilegal, es decir el Estado y los partidos del régimen del 78.

Siguiendo la falsedad de la versión oficial los considerados responsables de la Generalitat en el referéndum ilegal, y después de casi dos años de prisión preventiva, de la que solo se han librado los que desde fuera de España se han puesto en manos de leyes europeas, han sido condenados a un total de 100 años de prisión por delitos que nunca cometieron después de un vergonzoso juicio que ha incumplido todas las normas procesales, aceptando graves perjurios que explicaron la historia al revés donde los votantes agredían a los policías, como pruebas de la acusación, a lo que el tribunal añadió una dura limitación para impedir que las defensas pudiesen presentar pruebas de que se habían aceptado perjurios como prueba de la acusación. El fallo de esta burla de juicio provocó por un lado grandes manifestaciones de protesta en Catalunya cuya violencia fue amplificada por la pocilga mediática, y por otro el que los chorizos corruptos que les acusaron les calificaran, por supuesto erróneamente, de golpistas, y ver y oír a Pablo Casado y Cayetana Alvarez calificar a los condenados como delincuentes cuando los dos lideran el partido más corrupto, ladrón y criminal de Europa es una gran demostración de la inmensa montaña de falsedad, corrupción y franquismo que es España.

No satisfechos todavía con tanta falsedad y corrupción en septiembre 2019 la Guardia Civil presentó a la Audiencia Nacional pruebas falsas que indicaban actividades terroristas de 9 miembros de los CDR, organización independentista, y a pesar de que en pocos días la Audiencia Nacional reconoció que los detenidos no poseían ni armas ni explosivo han sido retenidos en prisión entre dos y tres meses, y dos de ellos continúan encarcelados.

Para completar el asqueroso espectáculo hacia mediados de Diciembre el Tribunal de Justicia de la U.E. sentenció que Junqueras tiene derecho a todas las prerrogativas de su condición de Europarlamentario, que por extensión también es aplicable a Puigdemont, Comín y Ponsati, y el franquismo explotó. Curiosamente, cuando la U.E. no ha denunciado y ni tan solo ha comentado la represión franquista contra el independentismo catalán y el juicio al process propio de la peor de las dictaduras, cuando el TJUE emite una sentencia basándose exclusivamente en la Ley toda la derecha española desde la radical de VOX a la moderada del PSOE se considera traicionada por la U.E., probablemente no cumplirán la sentencia del TJUE liberando a Junqueras y declarando nulo el vergonzoso juicio e incluso un demente como Jiménez Losantos suelta la animalada que la Justicia Española debe estar por encima de la europea porque no es corrupta, y la vicepresidenta del grupo socialista en la Eurocámara, la española Iratxe García, se puso a gritar como una loca y a tirar papeles al suelo en plena cámara europea.

Para completar el panorama además de la inmensa mentira, del fraude del juicio al process, y todas las barbaridades cometidas en relación con Catalunya, la pocilga mediática española lleva años publicando falsedades, difamaciones e insultos en relación con Catalunya con la clara intención de aumentar todavía más el ya elevado odio mayoritario a todo lo catalán hasta haber conseguido que catalanes más o menos independentistas sean peor considerados que lo eran en la edad media los individuos afectados por la peste. Uno de los mejores periodistas catalanes, el sumamente profesional Antoni Bassas se preguntó hace semanas si fuera de España no se consideraba muy extraño que la realidad de lo que ocurre en Catalunya y la versión que se explica en el resto de España se parezcan menos que un huevo y una castaña.  Hace pocos días el maleante y falso Pablo Casado afirmó que se debería poder pasear por Barcelona sin ser acuchillado, pero cuando oí tamaña asnada creí que se trataba de un fake, noticias falsas, hasta que vi en TV al mismo asno Casado diciéndolo ante un micrófono. En cualquier país serio y civilizado una descomunal barbaridad como esta provocaría un inmenso escándalo, en especial cuando se trata del líder del partido más corrupto de Europa, que en un país serio ya no existiría, y probablemente causaría el fin de la carrera política del monstruo que soltó la atroz salvajada, pero ya se sabe que en España no existe la responsabilidad pública y los políticos del régimen pueden hacer, robar y decir lo que les de la gana, y de eso en el partido del asno Casado saben mucho.

Por eso votaría por la independencia de Catalunya, para dejar de ser ciudadano de un país donde la mayoría de ciudadanos son ignorantes, estúpidos, falsos y corruptos.


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