Si observamos la situación, parece que la independencia o no de Catalunya es algo que rasga las vestiduras a mas de uno. Ayer mismo en las noticias un señor, que su semblante me recuerda a un portavoz del instituto Juan De Mariana, aunque no puedo prometer que sea el mismo, soltaba sin ruborizarse que habia que apoyar a las fuerzas armadas, por si era necesaria su intervención para garantizar la unidad del estado.
Por otro lado, conozco muchos independentistas y no me parecen precisamente radicales.
Pero la razon de todo es mas bien “sentimental” que no “real”, ¿que pasaría si el estado español fuera pasando competencias a Catalunya hasta que no quedaran competencias por pasar? ¿Se hundiría el mundo?, ¿los arcángeles con sus trompetas anunciarían el fin del mundo?.
Lo cierto es que Catalunya es mas nación y mas estado que muchas de las naciones recientemente creadas y que hemos corrido todos en reconocerlas. Hablar de que Catalunya nunca ha sido nación antes, es una falacia de tamaño de un trolebús, NINGUN país ha sido país antes de ser país. Hoy en día tenemos países en la Unión Europea con 4 días de existencia, como Malta o Estonia.
Todo son razones que nada tienen que ver con la realidad, para negar algo tan sencillo como preguntar.
Mi postura es clara: Que se lo pregunten a los catalanes y si quieren independencia luego es estudiar como se hace, sin fuerzas armadas, sin chillidos, sin tonterias, educada y calmadamente.