Mecanoo, simbiosis urbana

La incorporación de las rutas digitales en la estructura de las bibliotecas tradicionales promueve una redefinición en su carácter funcional. La atmósfera de las salas del pasado es transformada por la incorporación de las nuevas tecnologías, que diversifica y agiliza el acceso al conocimiento; la biblioteca, por lo tanto, debe compatibilizar el funcionamiento armonioso de ambos métodos de estudio.

En el caso de la Biblioteca de la Universidad de Delft, la necesidad de vincular el nuevo edificio con un auditorio existente suma otro condicionante. Proyectado por Van den Broek y Bakem, está ubicado en una posición central y establece una referencia ineludible en el campus universitario. Mecanoo responde a estas condicionantes con un plano inclinado cubierto de césped, que enfrenta al antiguo auditorio en su punto más bajo y se eleva hacia la calle, ubicada en el extremo opuesto. De este modo, Mecanoo garantiza la continuidad del espacio libre y evita la confrontación entre ambas estructuras, además de crear debajo del parque el espacio necesario para albergar la biblioteca

En el lado bajo propone la continuidad del espacio libre. En el más alto, ofrece a la ciudad una enorme fachada de vidrio de alto rendimiento que deja ver la actividad que se desarrolla en su interior. A modo de faro, un cono que simboliza la tecnología atraviesa la biblioteca para construir un hito visible que confiere identidad a la biblioteca. El acceso se genera al horadar un sector del plano inclinado, contenido por paredes que se estrechan en forma de embudo hasta llegar a la puerta principal. En el interior de la biblioteca, la mayor parte de la actividad pública se concentra en el enorme espacio central, donde el ingente cono permite un abundante ingreso de luz natural.

El ingreso de luz desde los laterales propone un contrapunto lumínico en el interior. De esta forma, se alcanza un entorno con intensidades variables, propicio para diferentes actividades de lectura. En uno de los laterales, pasarelas en altura rodean los estantes de libros se ubican sobre un muro de color azul que, además, aporta un interesante contraste con los tonos de madera del resto del edificio. En el lado opuesto, lindante a la sala central, se ubican 300 puestos de trabajo para la información digital.

Mecanoo reformula un programa tradicional y la vez, se integra en el contexto mediante una relación simbiótica que pondera el espacio público por encima de cualquier otro atributo.

Memoria descriptiva

Simbiosis

En el diseño de una gran biblioteca universitaria nueva, varias referencias vienen a la palestra. Bibliotecas famosas, desde la antigua Bibliothèque Nationale de París (1875) de Henri Labrouste hasta la Biblioteca Municipal de Estocolmo (1927) de Erik Gunnar Asplund, han reclamado un edificio contemporáneo avanzado. Hoy en día, tal edificio debe ser una puerta de entrada a la autopista digital, pero también debe hacer referencia a importantes tradiciones, incluyendo el acceso al conocimiento y la atmósfera enrarecida del estudio dentro de un entorno espléndido. En el caso de Delft, con mil estaciones de trabajo e instalaciones para alojar a tres mil estudiantes cada día, el edificio también debe ser el corazón de la universidad y proporcionar un punto de referencia dentro de un campus del tamaño de una pequeña ciudad. El diseño también debe considerar su relación con el auditorio situado en el centro, el edificio brutalista de Van den Broek y Bakema, grandes nombres en la historia de la universidad y la arquitectura holandesa. A través del contraste, se ha establecido una simbiosis - el altísimo hormigón del auditorio y el paisaje en el que se encuentra la biblioteca forman una nueva unidad.

Alfiler

El gran techo de césped está inclinado hacia arriba en una esquina como una hoja de papel sostenida por un solo punto. El hueco de abajo alberga la biblioteca. Un cono, símbolo de la tecnología, atraviesa la biblioteca y el paisaje, fijándolos como un alfiler. Con un techo cubierto de hierba, fachadas acristaladas de alto rendimiento y almacenamiento subterráneo para la calefacción y la refrigeración, el edificio alcanza altos niveles de sostenibilidad. La entrada permite vislumbrar las pilas de libros hundidas para libros raros e irremplazables. En el interior, el imponente estante suspendido para los libros menos frágiles asombra al visitante. El fondo azul profundo da a las estanterías de pared a pared la sensación de un escenario teatral. Las columnas de la sala central no sólo son estructurales, sino que también proporcionan iluminación y calefacción. El techo metálico inclinado continúa sin interrupción a través de todos los espacios sobre un suelo del color de la arena sahariana.

Perspectiva

Una biblioteca debe proporcionar un ambiente que permita la concentración a través del silencio, un mobiliario cómodo y una iluminación agradable. La luz del día penetra en el edificio no sólo a través de los vidrios de control climático de la fachada, sino también a través del cono que atraviesa hasta el corazón del edificio. El cono también da forma a una variedad de salas de estudio. El espacio que linda con el salón central contiene largas mesas con trescientos puestos de trabajo con particiones en una perspectiva cambiante deudora de Labrouste.

Fotografías: ©Mecanoo

TECNNE, Arquitectura y contextos