Media Liga

Tras media Liga el Barça se ha proclamado Campeón de Invierno como ocurrió en las dos Ligas anteriores que ganó, tras media Liga el Madrid está por detrás del Barça como en los dos años anteriores, tras media Liga el Barça ha conseguido el récord de puntuación en una primera vuelta como ya sucediera en el primer año de Pep, tras media Liga el Barça juega el mejor fútbol que se puede ver en España, por no hablar del mundo, mientras el Madrid basa su fútbol en lo mismo que hicieron Pellegrini, Juande Ramos o Schuster. Todo eso en media Liga.
Y tras el empate de hoy del Real Madrid en Almería muchos pensarán que tras media Liga el Barça ya tiene media Liga. Como dije tras el 5 a 0 del clásico, pensar eso es el primer paso para perder la Liga, porque el conjunto blanco, que hoy parece que está acabado, con un entrenador que ha hecho de un equipo históricamente ganador y señor, un equipo segundón, llorón y odiado en muchos lugares de España, perderá muy pocos puntos de aquí a final de Liga. Porque el Madrid es así, cuando parece que está muerto, y hoy lo parece, resurge para obligarnos a realizar los mejores números de toda nuestra Historia.
Pero viendo a este Barça no hay de que preocuparse, no tan solo por el enorme fútbol que despliega inalcanzable para nadie en este mundo futbolístico, sino por la actitud que demuestra un partido tras otro un equipo que lo ha ganado todo, pero que parece que no ha ganado nada. Ver a los tres finalistas del balón de oro correr como posesos detrás de cada balón o a un fichaje de 40 millones dejarse la piel en cada una de las jugadas, son simples señales de que este equipo es diferente. Y si alguna vez lo olvidan Pep se encargará de recordárselo en cada uno de los partidos.
El equipo saltó al campo conocedor de que hoy era una oportunidad de las pocas que tendrá durante el campeonato para poder ampliar la distancia con su inmediato perseguidor. Y esa ha sido la principal razón de la espectacular primera parte del equipo, con un Busquets inmenso en el medio centro, Abidal pletórico en la banda y el tridente de ataque disfrutando de la tranquilidad con la que jugaban Xavi e Iniesta. Y a todo eso el equipo le ha añadido una intensidad máxima, lo que se ha traducido en que en un cuarto de hora Iniesta y Villa ya habían dejado sentenciado el partido.
Porque es tan superior este Barça que los rivales en cuanto comienzan a recibir los goles, su actitud es más de intentar no encajar más porque son conocedores que remontar es misión imposible. Y a eso se dedicó el Málaga, pero fue incapaz de aguantar el ciclón blaugrana, hasta que Pedro, el de siempre, finalizó el partido con el 3 a 0 antes de llegar al descanso.
La segunda parte no tuvo historia, donde Barça y Málaga salieron a no agredirse y a dejar pasar los minutos, hasta que Duda convirtió una falta de manera magistral y sólo consiguió despertar a la bestia para que minutos después Villa sentenciara el partido. Afellay animó los minutos finales dando destellos de lo que puede aportar, mientras Bojan volvió a tener unos minutos que de nuevo volvió a no saber aprovechar.
Comienza ahora una segunda vuelta que seguro será muy apasionante. Mientras el Barça espera que lo sea en el campo otros parecen empeñados en que lo sea en las ruedas de prensa y en los despachos. Y cuanto más sea así, mejor para el barcelonismo.
Disfrutemos la media Liga.
Foto: www.sport.es