Revista Salud y Bienestar

Medicina sin límites, un peligro para población, médicos, Administración, industrias

Por Miguel @MiguelJaraBlog

La Medicina se basa en los “sanadores”, profesionales que ayudan al hombre a enfrentarse al sufrimiento, el dolor y la muerte. A veces los “sanadores” se exceden y se convierten en “curanderos” que prometen casi milagros. Cabe hacer negocio con estas promesas milagrosas y entonces los médicos devienen en “comerciantes”.

Por otra parte, la sociedad espera demasiado de la ciencia y de la medicina. Y cuando lo consigue muchas veces obtiene lo que no quiere. Buen ejemplo es el de Midas, al que Dionisio le concedió su deseo de transformar en oro todo lo que tocase. Por ello en Medicina es necesaria la sensatez, la humildad y la piedad, para poder ofrecer lo mejor sin hacer daño.

Sanidad medicina salud pública Como explica el médico y colaborador habitual de este blog, Juan Gérvas:

La “Medicina sin Límites” produce daños sin límite a los pacientes, familias, comunidades, profesionales y sociedad. La Medicina puede ofrecer mucho, desde prevenir a curar, desde consolar y ayudar a bien morir, desde eliminar dolores a acompañar en el sufrimiento. Pero en la búsqueda de un imposible (“una píldora para cada mal”) puede hacer mucho daño.

Y de hecho, la Medicina sin Límites es la que predomina, la que se está convirtiendo en un peligro, la que es dañina.

En este texto y conferencia se analiza a fondo la cuestión y algunas soluciones, con estudiantes de sociología en la Universidad de Granada (España). Os adelanto, más sanidad no conlleva mejor salud de la población.

¿Evidente no?, pues no lo parece si observamos la medicina de hoy pero claro, hay que entender que está minada por los intereses económicos y políticos:

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Ya lo habéis visto, creencias que colisionan con la Ciencia. Me ha gustado lo de “Periodismo es hacer público lo que no se quiere que se publique y con la Ciencia lo mismo es cuestionar lo que hay, lo demás es hacer cátedras”.

La verdad, no entiendo que la ministra española de Sanidad, Ana Mato, “fiche” para privatizar la gestión del hospital de Melilla a Manuel Lamela, exconsejero de Sanidad en Madrid, que está imputado por prevaricación y tráfico de influencias por hacer negocio con la privatización sanitaria madrileña, teniendo tantos profesionales de enorme nivel para ejercer en su puesto (seguro que no sólo no privatizarían sino que harían desinversiones en gasto sanitario inútil. Más no es mejor.


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