Los metaleros tapatíos mantuvieron un entusiasmo que rayaba en caos mientras el set list seguía avanzando. Los más rudos le entraron al slam y todos coreaban “ole, ole, ole, Dave, Dave”. Mustaine lució contento con el público e interactuó repetidamente con ellos, algunas veces improvisando algo de español, lo cual más enloquecía a la audiencia.La mancuerna Mustaine-Loureiro lució todo el concierto, y Verbeuren complementó perfecto haciendo lo suyo en la batería, mientras Ellefson se mantuvo un poco discreto ante los demás integrantes, pero haciendo un excelente trabajo en el bajo.Al llegar a “Symphony of Destruction” todo el mundo sabía que el final estaba cerca, se comenzaron a despedir con “Peace Sells”, para darnos un regalo especial con Rattlehead y la presencia en el escenario de Vic Rattlehead, enloqueciendo aún más a los asistentes. Los cuatro integrantes salieron una vez al escenario para cerrar de manera grandiosa con “Holy Wars... The Punishment Due”, con un público al límite de la cordura, que todavía tuvo la entereza de poner su mejor actitud metalera para posar a la fotografía que tomó Dirk Verbeuren.Sin duda un excelente concierto, Dave Mustaine y Megadeth están más vigentes que nunca. Dystopia se perfila para ser uno de sus mejores álbumes, y Guadalajara puede dar fe de esto.
Fotografías cortesía de Nación Imago para Teatro Estudio Cavaret