Esta receta de mejillones es una de las grandes desconocidas, hubo una época en la que muchos restaurantes y cocineros/as los preparaban, actualmente se elaboran de una manera más sencilla para que todos/as podamos hacerla. Esta receta se suele utilizar como aperitivo o como 2º plato. Primero, como en cada receta de alimentación saludable veamos la receta desde el punto de vista nutricional. Obtenemos 305 KCAL distribuidas de la siguiente manera: 43.1 Hidratos de Carbono, de los cuales 2.8 gr. de Azúcares, 15.9 gr de Proteínas, 7.5 gr de Grasas de las cuales 2 gr. Saturadas. Ingredientes para 3 personas:
½ unidad de Puerro ½ unidad de Pimiento Rojo 1 Diente de Ajo ¼ Manojo de Perejil Sal/Pimienta blanca molida 50 gr de Mantequilla 2 Cucharadas de Harina 125 ml de Fumet (caldo de pescado) o agua Harina, huevo y Pan Rallado
Elaboración de la receta paso a paso con fotos explicativas: 1º Deberemos cortar las hortalizas (Puerro, ajo y pimiento rojo) en brunoise (cuadraditos pequeños), además separaremos los mejillones de su concha y lo cortaremos de igual manera que las hortalizas, además reservaremos las conchas, no las tiramos, porque estos mejillones se presentan en su concha. 2º Picaremos el perejil.
3º En un sartén con la mantequilla, rehogaremos el ajo, puerro y pimiento rojo hasta que quede bien transparente y pochado.
4º Posteriormente añadiremos la carne de los mejillones bien picada, las cuharadas de harina para que ligue o espese el preparado y el fumet para que vaya cociendo todos los ingredientes y se forme como si de una masa de croquetas se tratara pero más ligera, no tan espesa.
5º Con el relleno terminado en el paso 4 procedemos a rellenar las conchas de los mejillones para dejarlos enfriar 5-10 min y sean más fáciles de empanar.
6º Empezaremos a empanar todos nuestros mejillones colocando un bol o plato con harina, otro con huevo batido y un último con pan rallado. Para empanar lo haremos en ese orden, es decir, primero lo pasaremos por harina, luego por el huevo y finalizamos con el pan rallado.
7º Sólo nos quedará freir en abundante aceite y presentar el plato acompañado de alguna guarnición que nos apetezca, eso si, que no sea frita, podrá ser cocida, a la plancha u horno, aunque también se puede poner algo crudo como ensalada. Nosotros hemos decidido poner un poco de batata cocida y una berenjena al horno con tomate.