Mejorar tu rendimiento al correr

Una gran parte de corredores tiene como objetivo personal mejorar su rendimiento al correr. Se trata de hacer mejores tiempos, alcanzar una mayor velocidad o incrementar el número de kilómetros recorridos. Este proceso no se puede realizar sin un entrenamiento exigente donde a la vez se combine una buena alimentación junto a un descanso adecuado. Estos dos últimos factores muchas veces pasan desapercibidos pero son tan importantes como la práctica deportiva.

Si no se ingieren los alimentos adecuados no sólo no se están obteniendo los nutrientes que se necesitan para lograr los objetivos sino que además se consigue una propensión a sufrir lesiones. Una de las más comunes son las roturas fibrilares en atletas cuyo aporte alimenticio no es equilibrado con carencia de vitaminas. Descansar permite una recuperación óptima del organismo interno y externo así como un crecimiento muscular. Machacarse demasiado sin tiempo a recuperar sólo repercutirán en un rendimiento menor.

El factor mental juega un papel determinante en el proceso de obtener mejores resultados al correr. En primer lugar hay que tener una constancia que permita combinar el esfuerzo físico con la alimentación y el descanso. Al principio puede resultar duro, siendo poco a poco más llevadero convirtiéndolo en una rutina más. No se debe tirar la toalla a las primeras de cambio pues los resultados pueden tardar en llegar. No es un proceso de la noche a la mañana. En segundo lugar, aunque pueda parecer que se está alcanzando el límite, el cuerpo siempre puede dar un paso más, se trata de un bloqueo de cabeza que muchas veces impide llegar a esos puntos. Concentrarse al máximo y tener siempre claro que se quieren saltar los posibles obstáculos permite mejorar tu rendimiento al correr. Muchos atletas recurren a psicólogos deportivos para que les asesoren y ayuden a conseguir sus metas.

Es necesario saber regularse a la hora de realizar la actividad física, especialmente cuando se quiere superar el límite establecido previamente. Si en esa jornada se van a realizar rutinas explosivas donde el cuerpo se ponga en máximo funcionamiento es importante no haber realizado ejercicio intenso el día anterior para así no estar cansado. De esta forma se evitan posibles inconvenientes físicos que limiten el resultado. Por supuesto, deben haberse dormido unas 7 u 8 horas.