El momento espera
ingrávido, sin color.
Pronto, la alegría
se viste de las caricias
que un día llegaron
desde mares distantes.
Miro a mi alrededor.
Sola,
desnuda
me arrastra
la pena del otoño
¡Ay , cuántas cosas perdí!
besos arrebatados
por los caprichos
del tiempo.
Cierro los ojos y camino
a ciegas entre la gente.
Mundo vacío,
muerto de falsas apariencias
de falsos amores.
Ando entre escombros
de historias
en una sociedad
equivocada.