'Menón'. Guía de lectura y comprensión del texto

PLATÓNMENÓNTenemos que tener en cuenta que, siendo un diálogo de la primera época, no aparece en el Menón la teoría de las Ideas; esto implica que la reminiscencia no es del mundo de las Ideas, sino de otras vidas (81d), y que no se da coincidencia entre saber práctico y teórico, con lo que el llamado a gobernar no es el filósofo-rey sino el hombre divino (99c-100a). En el diálogo se trata de saber qué es la virtud y cómo se adquiere.Menón propone a Sócrates investigar si la virtud es enseñable.70a1 Se habla de Gorgias (el sofista) que representa aquel que sabe y, por ello, puede contestar a cualquier pregunta y puede enseñar. Lo que enseña es técnica, mera convención (véase 91c1 en donde Gorgias aparece con una postura cínica), según el modelo de la enseñanza sofista: se aprende a recitar de memoria máximas, que se incluyen en el discurso para persuadir, convencer y todo ello permite hacer bellos discursos (ver 80b2, en donde Menón así lo dice). En oposición, Sócrates no sabe, que es el punto de partida para investigar. Una expresión de ironía y de modestia que es uno de los momentos de la mayéutica. Sócrates reconvierte la pregunta de Menón: antes de saber si es enseñable o no la virtud habría que saber qué es. Sócrates intenta que Menón hable por él mismo (dialogue y no que cite de memoria a Gorgias).Primer intento de Menón de definición de la virtud.71e1 La primera definición de Menón de virtud se atiene a lo convencional: rige convención distinta para el hombre, para la mujer, para niño, etc.72a6 Se plantea la cuestión de lo idéntico y lo diferente (la analogía del enjambre ¿Cuál es la esencia de la abeja? ¿qué es la abeja en tanto que abeja?).72c7 Para Sócrates las diferentes virtudes deben tener una única y misma forma [edoj] gracias a la cual son virtudes; para explicarlo pone como ejemplos la salud y la fuerza. Ante la desaprobación de esta comparación, Sócrates demuestra que no se puede explicar la virtud partiendo del concepto sofístico (una virtud particular para el hombre y otra para la mujer, para el niño, para el esclavo) sino a partir de algún otro concepto o virtud más general (como la justicia y la templanza).Segundo intento de Menón de definición de la virtud.73c9 Menón reformula su definición para que sea general: es la capacidad de gobernar a los hombres. Ante esta nueva definición, Sócrates muestra la contradicción pues el esclavo no manda y el que manda debe hacerlo con justicia. La cuestión es si la justicia es la virtud o una virtud concreta. Menón enumera como virtudes: la valentía, la templanza, la sabiduría, la magnificencia.74b2 Sócrates demuestra la necesidad de encontrar la identidad en lo múltiple o lo plural mediante el ejemplo de la figura y el color. Sócrates propone a Menón como ejercicio metodológico una definición general de figura aplicable posteriormente a la investigación de la virtud.75c8 Los sofistas son aludidos como los sabios que polemizan y compiten; frente a ellos, Sócrates apela a la amistad como condición del diálogo que permite encontrar la verdad. Sócrates propone una definición de la figura y el color tal como harían los sofistas, que si bien a Menón convence no es de su agrado.77a3 Se investiga cómo se formula una buena definición: será aquella que se expresa en términos universales [77a6 - primera y única vez que Platón emplea este término que será empleado por Aristóteles]. Posteriormente se afirmará también de la definición que será aquella que no utilice términos que aún no han sido investigados [79d1] y ha de buscarse la buena definición por hipótesis [83e6].Tercer intento de Menón de definición de la virtud77b2 La virtud sería el deseo de las cosas bellas y la capacidad de procurárselas. Sócrates refuta la primera parte de esta definición sosteniendo que dado que aspirar a la belleza es aspirar al bien, todo el mundo pretende alcanzar el bien, salvo los ignorantes (aparece la idea de que virtud es saber: el intelectualismo moral). Puesto que es común a todos los hombres no permite distinguir la virtud; las diferencias se dan en la segunda parte de la definición que es la capacidad de procurárselas. Pero como procurarse bienes puede hacerse justa (virtud) o injustamente (vicio) tampoco nos permite descubrir lo que es la virtud.79a3 Si se acepta que la virtud es la capacidad de procurarse bienes con justicia se confunde la parte con el todo pues la justicia se había considerado una parte de la virtud. Se repite la necesidad de definir el todo y no las partes [79b7; 79c1] (imposibilidad de saber qué es un caso particular sin saber qué es lo general).79d1 Se añade la exigencia de que no se puede definir con términos aún no investigados.79e7 Como resultado de la ironía socrática se crea la confusión y Menón compara a Sócrates con un pez «torpedo» que entorpece y confunde a los demás. Sócrates a su vez afirma que Menón es bello, lo que le lleva a ser exigente.80d5 Menón plantea a Sócrates el siguiente argumento paradójico: tanto investigar lo que se sabe es absurdo como reconocer que se ha encontrado lo que se busca si no sabemos de antemano lo que buscamos.La reminiscencia (basada primero en la creencia mítica y luego en la demostración empírica).81a10 La única solución al paso del no-saber al saber es que es un saber por medio del recuerdo (reminiscencia). Se explica el fundamento de la reminiscencia [en donde no aparece la teoría de las Ideas]. El alma es inmortal y no aprende, sino que recuerda lo que ya sabía.81d5 Pero para descubrir las cosas se requiere no sólo el recuerdo sino además el esfuerzo personal. Investigar y aprender es reminiscencia, pero no en el sentido del argumento de Menón, pues éste nos haría pasivos mientras que el que propone Sócrates no haría activos y amantes de la investigación.82b3 A través del diálogo con el esclavo (con el requisito que hable griego), mediante una demostración geométrica se muestra cómo es posible recordar. El esclavo tiene momentos de error, de duda, pasos necesarios para la mayéutica, con lo que se afirma implícitamente la teoría de la reminiscencia.86b6 Sócrates cree que Menón ha aceptado la posibilidad de pasar del no-saber al saber, y que con ello se ha librado del argumento polémico [80d5]. Esto implica que podría investigar qué es la virtud, que es lo que busca Sócrates, pero Menón insiste en saber cómo se adquiere.86d3 Sócrates utiliza los conceptos de dominio de sí y de libertad para criticar la postura sofista de Menón. [Efectivamente, Menón no se domina porque cree que en ello reside su libertad frente a la idea socrática de que libre es quien no es esclavo de sus apetitos, lo cual exige dominarse, mandarse, gobernarse.]Intento de establecer si la virtud es enseñable con el procedimiento de la hipótesis86e3 Sócrates accede a contestar la pregunta de Menón pero a partir de una hipótesis (se inicia diciendo «Supongamos...») y la dialéctica toma de nuevo como modelo la geometría.87b2 La hipótesis: la virtud, siendo de entre aquellas cosas que conciernen al alma, es semejante o difiere del conocimiento (sea el conocimiento enseñanza o recuerdo). Se acepta que la virtud es un tipo de bien al igual que el conocimiento (ambos son útiles).88b1 Pero, por ejemplo, el valor sin prudencia (sin conocimiento, sin juicio) es temeridad (igualmente con la templanza y la facilidad para aprender). Conclusión: la virtud tiene que ser una forma de prudencia [la teoría de fondo es el intelectualismo moral]. De igual forma la prudencia hace que el resto de los bienes sean útiles (p.ej. la riqueza).89a5 Consecuencia: no se es bueno por naturaleza. Se comprueba que es válida esta consecuencia en que los buenos no son reconocibles.89b9 Se podría inferir que se es bueno por aprendizaje [Menón da por válido este paso al haber supuesto que la virtud es ciencia Spara un sofista la ciencia es enseñableS, no así para Sócrates como vimos antes].89e1 Si es enseñable una materia se precisan profesores y discípulos de ella. Si no hay profesores ni discípulos de algo es que no hay nada que enseñar. Habrá que demostrar que hay maestros de virtud.El problema de los maestros de la virtud89e10 Aparece Ánito que es presentado por Sócrates como un modelo de hombre virtuoso y capaz de haber educado correctamente a sus hijos. Sócrates pregunta a quién ha de dirigirse Menón para ser virtuoso al igual que se manda a aquellos que ejercen la profesión cuando se quiere uno hacer médico o flautista.91c1 Aparece por boca de Ánito el viejo modelo de enseñanza griego, en donde cualquier ciudadano inculca los valores morales y políticos sin cobrar, sin método (crítica a los sofistas que no son maestros de virtud).93b7 Pero para Sócrates, por medio del examen de casos históricos como el de Pericles, la virtud no se transmite de un hombre virtuoso a sus seguidores o hijos. (El que alguien sea bueno y virtuoso no implica que sea buen maestro de virtud).95b1 Los hombres buenos de la ciudad no se ponen de acuerdo acerca de si la virtud es enseñable. Gorgias tampoco cree que es posible y se limita a la oratoria.96a6 La virtud es una cuestión confusa pues por un lado los que dicen enseñarla no la poseen y los que la poseen no la pueden enseñar. Se concluye que la virtud no es por enseñanza cómo se adquiere.La opinión verdadera96d7 Se ha cometido un fallo al considerar la virtud un conocimiento. La virtud puede ser una opinión verdadera, una recta opinión (basada en la experiencia p.ej. el camino que conduce a Larisa), diferente de la prudencia (que también es útil en estas cuestiones). [La recta opinión está entre la epistemé y la dóxa]98a3 El conocimiento difiere de la recta opinión por su estabilidad y su razonamiento de la causa, pero en términos prácticos (relativos a las acciones) es tan bueno como la ciencia. No obstante, al ser opinión puede errar, mientras que la ciencia no.98d1 Sócrates aprovecha para recapitular los argumentos anteriores: ni el conocimiento ni la opinión verdadera se pueden dar por naturaleza. La virtud tampoco es enseñable, porque no hay maestros de virtud, así que no es la prudencia. La virtud es algo que nos dirige bien, correctamente en la acción, pero no puede ser la prudencia, así que tendrá que ser la opinión verdadera.99b11 Los políticos no difieren de los adivinos, agoreros y poetas, que afirman muchas verdades sin saber lo que dicen. Por eso son hombres divinos.99e5 La virtud no es por enseñanza, ni por naturaleza sino un don divino.100b6 Aun así, se ha descubierto cómo consiguen los hombres la virtud, pero seguimos sin saber qué es la virtud en sí misma.