Piensa lo complicado que es hacer un referéndum de independencia. Mira los problemas que tienen todavía en Kosovo. Y la que se arma en España con tan sólo mentar tal posibilidad. Así que imagínate ahora cómo será ese mismo referéndum en Sudán. Muy difícil, sin duda. Dificilísimo. Y sin embargo, parece que todo sigue adelante tal y como estaba planeado. Por el momento, nada hace pensar que el referéndum para la independencia del sur de Sudán, previsto para el 9 de enero de 2009, no vaya a celebrarse.Otra cosa será lo que pase después.
Sudán es el país más grande de África y desde su independencia, en 1956,
siempre ha vivido el enfrentamiento entre los musulmanes del norte
y los cristianos del sur. El próximo mes de enero,
podría convertirse en dos países independientes.
De momento, el registro de votantes se ha llevado a cabo de manera pacífica, que era muy importante. Luego vendrán los problemas por algunas áreas, hasta un total de 12, sobre las que todavía existe disputa territorial. Y sobre el petróleo, el 90% del cual está en el territorio del sur pero que se exporta al mundo por puertos controlados por Jartum, capital del norte.
Y más interesante aún será ver cómo reacciona la Unión Africana y otros países que no quieren ni oír hablar de modificaciones territoriales, por mucho que éstas obedezcan a criterios colonialistas. Así lo determinaron en 1963 al establecer la inviolabilidad de las fronteras, para intentar imponer estabilidad en el continente africano.
¿Y qué es exactamente lo que ha pasado para que termine por celebrarse este referéndum? Pues nada más y nada menos que una guerra de 22 años de duración (1983-2005), un número indefinido de muertos –se calcula que unos dos millones y medio, pero las cifras no son definitivas- y casi 5 millones de desplazados. Una guerra que enfrentó al norte, musulmán, con los cristianos del Sur y en la que siempre hubo guerrillas, comandos, rebeldes y la ya tradicional tropa de las guerras africanas. Pero a pesar de ello, en 2005 se llegó a una acuerdo de paz, que se ha respetado más o menos ininterrumpidamente y que, preveía que ahora, en enero de 2011, los ciudadanos de Sudán del Sur, o Sub-sudán, decidieran si querían la independencia o seguir formando parte del país. Todo el mundo da por hecho que se decidirán por la primera opción y que Jartoum lo aceptará, pero hay también quien apunta a una nueva redición de la guerra.
De cualqueir modo, varios periodistas españoles nos los irán contando sobre el terreno.