Ya entrados de lleno en el nuevo curso escolar… ¿A qué padres no les suenan esas interminables tardes con los niños pegados al libro y al cuaderno haciendo los deberes? ¿Quién no ha visto a esos pobres niños con mochilas a la espalda infinitamente más grandes y pesadas que ellos mismos?
El problema es que al contrario de lo que muchos puedan creer, esto no está ni de lejos en consonancia con el resultado académico de los escolares.
La agencia de publicidad Sapristi ha creado una campaña para la empresa de juguetes Cayro con una apuesta firme: Con menos deberes y más diversión es posible aprender más. La iniciativa lleva por nombre El Examen de Cayro, y se trata de una acción que reivindica los #Deberes4Horas, para que los niños recuperen las 2 horas extra de deberes que hacen con respecto al resto de Europa.
Entre todos (colegios, profesores, madres y padres, blogs, medios de comunicación y sociedad) podemos conseguir más tiempo para jugar y una mejor educación. Porque jugar no está reñido con aprender, sino que es un estimulante educativo muy necesario para los más pequeños