Revista Opinión
En primer lugar, mentir es afirmar algo que es falso, aún cuando no sepamos que no es cierto. También existe la mentira que ayuda a convivir y la piadosa. Otra cosa es engañar, En este caso existe una voluntad, una premeditación y la búsqueda de un beneficio. Hoy día tengo claro que cualquier usuario/a de Internet y sobre todo en las redes sociales, pueden crearse diferentes perfiles y por lo tanto crearse una vida ficticia que es toda una mentira. En el caso de los que quieren ocultar su nombre, apellidos y foto reales, no existe engaño, si los demás saben que usan un seudónimo y un avatar con la única intención de proteger su identidad e intimidad a que todo el mundo tiene derecho según la ley.Pero Internet se ha convertido en un territorio de caza para todos los sinvergüenzas, estafadores, criminales de todo tipo y los más peligrosos…violadores, asesinos y psicópatas. Que se aprovechan del anonimato para moverse como pez en el agua y su peligrosidad consiste en la facilidad que tienen para captar a todo tipo de personas y convencerlas para hacer cosas que nadie haría si alguien se lo pidiera por la calle. Por otro lado, ya puedes ser rico, famoso, estudiante, ama de casa o a cualquier otra persona que utilice Internet y las redes sociales, si usas tu verdadero nombre y apellidos al registrarte te estarás buscando problemas. A los gobiernos y empresas como Facebook al anonimato le tienen verdadero terror, por que dejan de controlar a esa persona, ellos necesitan que renuncies a tu privacidad y si intentas protegerte te arriesgas a vivir marginado y excluido.Tenemos que tener en cuenta, que nuestra privacidad es una moneda virtual que compra productos que el dinero real no puede comprar. Por eso, hoy día entrar en algunas webs a escuchar o descargarte música se convierte en algo imposible a menos que estemos dispuestos a registrarnos en Facebook con nuestros datos y nombres reales. De este modo, escuchar música de una manera anónima se convierte en algo anómalo y posiblemente en el futuro y gradualmente, pudiera convertirse en algo muy caro. En mi caso, una amiga me convenció y abrí una cuenta en Facebook hace tiempo “prácticamente no la he usado”. Pero hace unos meses recibí un correo de Facebook en donde me pedían una copia de mi DNI para asegurase de que mis datos y foto que en su momento había dado eran reales, naturalmente los mandé a la m… Este es el motivo que hoy día en Google te exigen al registrarte un teléfono de contacto, a donde te envían un SMS para asegurarse que no les estas dando un numero falso, hace años no te lo pedían y hoy te lo piden porque con el número de teléfono te tienen pillado.Pero podemos cambiar este sistema en donde nuestros datos personales son la moneda de cambio. Simplemente volviendo al sistema de toda la vida, alquilar las películas en el vídeo club del barrio o sacar prestados los libros de las bibliotecas públicas, por supuesto volver a comprar en los comercios de toda la vida, porque Internet nos hace la vida mas cómoda, pero también nos expone a un grave peligro y no solo porque nos quita nuestra intimidad…si no porque nos puede costar la vida. Por tanto, nuestros más íntimos pensamientos, inquietudes y aspiraciones, desde la cuna a la tumba quedan expuestos a todo el mundo, y empresas como Facebook van a sacar provecho de tales intimidades mediante la publicidad dirigida. Además tengo claro que a los sitios de redes sociales les vienen tan mal los usuarios con seudónimos como a los bancos los activos tóxicos. Porque todas nuestras actividades son observadas, grabadas y analizadas al objeto de predecir nuestro comportamiento futuro.Para terminar, en mi caso me protejo utilizando una aplicación de pago, que me permite obtener, de una forma sencilla, protección y anonimato mientras estoy conectado a Internet tanto en casa como en una red pública, oculta mi IP real y de donde me conecto, además evita que las páginas webs sigan mi rastro y motoricen y guarden todos mis pasos. Y cuando me veo obligado a dar mi número de teléfono, doy el de prepago que lo tengo hace muchos años. En cuanto al móvil que tengo de contrato, también intento protegerme no instalando aplicaciones para evitar que tengan acceso a todo lo que tengo en el móvil, cámara, contactos, mensajes, fotos, ubicación etc. por eso siempre tengo desconectado el GPS y mi ubicación, aunque ya sabemos que incluso con el móvil apagado pueden controlarte.