Cuando el Gobierno impulsó en 2012 la última reforma laboral, me aventuré a escribir sobre ella, presagiando que no iba a servir para crear empleo, sino que más bien lo destruiría.
Ahora con los datos, justos y necesarios, sin complicarnos mucho, para que todos lo podamos entender, repasaremos brevemente lo que ha ocurrido en estos dos años, lo cual me servirá para aclarar el optimismo de la lectura de los mismos por parte del Gobierno, y que por mucho que se repitan afirmaciones falsas, éstas no se convierten en verdades........Seguir leyendo.......