Cuando a finales del año pasado se desintegró la maravillosa Taverna Siciliana, surgieron de ella dos nuevas propuestas con un denominador común, pero aspiraciones muy diferentes. De Mezzogiorno ya hemos hablado en estas páginas, y hoy le toca el turno a Mercato Ballaró, el restaurante y bar de Angelo Marino, quien fuera durante más de una década el alma de la Taverna Siciliana. Mercato Ballaró no es un restaurante al uso. De hecho, pese a visitarlo con bastante asiduidad, me ha costado bastante animarme a escribir de él en estas páginas por la necesidad de reflexionar más acerca del objetivo que Angelo busca con este nuevo proyecto. Ubicado en lo que fuera Stendhal, el sitio que Pablo Soler puso en marcha, y que injustamente no acabó de cuajar pese a su soberbio brunch, el local se compone de dos espacios perfectamente diferenciados en dos plantas. La planta baja, con mesas altas y taburetas, una barra que recuerda a las de las Cerverías Santa Bárbara, y cuatro mesitas bajas, fomenta el tapeo, el aperitivo, el picoteo. Arriba en cambio asistimos a un restaurante mucho más formal, de ambiente cuidado, que intenta recordar algo el ambiente de la Taverna Siciliana.
Pero entremos en detalle, y empecemos con “Mercato Abajo”, que me convence mucho más que la parte de arriba. La oferta abajo como decía está muy enfocada al picoteo. Mesas de madera, sin mantel. Entre los entrantes, destaca un “Panne Fratau con uova di gallinella in libertá” que básicamente es una base de pan sardo crujiente, con huevo, salsa de tomate y queso peccorino. Exquisito y diferente. También nos gustan los “Involtini di melanzane e zucchine ripiene di scamorza e mozzarella”, rollitos de berenjena con calabacín y quesos scamorza (un queso ahumado típico italiano) y mozzarelaa. Son ligeros al no ir rebozados ni fritos, y el contraste de ambos quesos resulta muy interesante. Los “Panzerotti fritti ripieni di primosale, acciughe e pomodorini” (empanadillas fritas rellenas de queso y acompañadas de tomaté concassé) son un poco aceitosas, aunque el tomatito tierno mitiga un poco la sensación de pesadez. Las alcachofas fritas, un poco estilo las de Arzábal, son crujientes y están muy bien fritas. Otros entrantes que ofrecen son mejillones con tomate, focaccia blanca con embutidos italianos (recomendable para compartir) y alguna ensalada.
Pero aquí el auténtico protagonista es la pasta. Pasta perfecta de cocción, muy al dente, tanto que al comensal español le puede resultar incluso dura, pero que sin embargo está perfecta para los cánones italianos. Las propuestas de la Taverna nunca fueron sencillas, y tampoco lo iban a ser aquí. No encontraremos pues una pasta con salsa de tomate, y unos raviolis con crema, sino creaciones mucho más complejas, que se sirven todas ellas en medias raciones, a un precio de entre € 5 y € 7. Me gustan especialmente los tagliolini con zumo de Sicilia al mortero y los fusilli con cuatro tomates y salsa de ricotta salada de oveja. Otras propuestas incluyen unos sabrosos fettuccini con setas, unos spaghetti con sardinas e hinojo Siciliano e incluso unos divertidos spaghetti con albóndigas.
La casquería tiene también un papel importante, ya que nos ofrecen platos tan dispares como un caldo con callos, una ensalada de lengua, un plato de tendones y cartílagos en salsa o unos ravioli rellenos de higaditos. Todo ello, como las anteriores propuestas, en medias raciones pero que resultan perfectas para tomar dos platos por persona y probar cosas diferentes. El precio de esta “parte baja” está muy muy ajustado, entorno a € 20 por persona o menos incluso.
Subamos ahora las escaleras que conducen al “Mercato Arriba”. Como decía, aquí nos encontramos un ambiente mucho más cuidado, más lujoso y delicado. La carta cambia radicalmente, y también los precios. En “Mercato Abajo” podemos pedir también cualquiera de los platos del restaurante. AL revés, no lo tengo tan claro… Entre los primeros, platos como un flan de berenjenas con tomate y queso, que resulta bastante cremoso, unos chipirones en tres texturas (tartar, buñuelos y cortados en spaghetti) que dejan algo indiferente, un guiso de pulpo o un carpaccio de corvina sobre pan sardo entre otros.
Las pastas nos las ofrecen también en composiciones algo complejas. Como ejemplo, unos fetuccini con corvina en salsa de puerros (a los que a mi entender la salsa de puerros resta importancia), unos bucatini con huevas de atún y almendras o unos pappardelle con codorniz y queso de oveja al azafrán. Las pastas están más pensadas como primer plato, aunque recomiendo más tomarlas como plato principal al ser la mayoría bastante contundentes. En cualquier caso, como platos principales nos sugieren diversas carnes y pescados.
Entre los pescados, cabracho con lentejas, corvina con setas o cuscus con pescado de roca. Suelen tener también alguna sugerencia de pescado del día, interesantes para hacer a la plancha o al vapor. Para los carnívoros, una carrillada de ternera con guisantes o una pintada a la grappa con polenta. Sugieren también una hamburguesa de ternera asturiana, con elección de queso italiano, pero sinceramente, no es éste un sitio al que se venga a tomar hamburguesa. Si me permitís la recomendación, éste es un sitio para pedir pasta, que es lo que bordan. De postre, probad el tiramisú. Es soberbio.
Pese a llevar ya varios meses abiertos, el servicio es el punto más criticable. Es malo, poco profesional, en general poco simpáticos, y no ayudan nada en la elección. Ni tan siquiera son capaces de informar bien acerca de las sugerencias del día, o los vinos que ofrecen por copas. Un aspecto que sin duda tienen que mejorar radicalmente, ya que son ya muchos los comentarios que se oyen de gente que no piensa volver por el pésimo trato recibido.
Insisto en lo que comentaba al principio. Creo que la parte de abajo, para una comida o cena informal, es una magnífica opción, teniendo en cuenta no sólo el ajustadísimo precio, sino la calidad que nos sirven. Lo del restaurante de arriba, tengo más dudas. Me encantará conocer vuestros comentarios, así que los que vayáis, o si ya habéis estado, contadnos!
Datos de interés:
Mercato Ballaróc/ Sta. Engracia, 24Tel.: 91.310.16.18 Precio medio: € 20 (Mercato Abajo) y € 45 (Mercato Arriba) Accesible silla de ruedas: Mercato Abajo