Meses esperando mi regalo de Santa Claus y Duro menos de un dia.

Solía ser la Navidad del año 2004, yo en esos tiempos aun creía en Santa junto con mis dos hermanos, menores, me acuerdo que aun éramos de esos a los que sus pasas, llevaban a las plazas o a las oficinas de correo para enviar la carta y recibir en Navidad el regalo.

Pues en esa navidad en específica, recuerdo que quería una figura de acción de Max Sttel, que venía con su moto de agua, por lo que estaba ansioso por ya recibirlo, pero todo cambio a pocas semanas antes de la navidad.

Mi familia acudió como de costumbre al súper a realizar sus compras, cuando yo me escape junto mi hermano menor al área de juguetes, fue entonces donde mi hermano menor, vio lo que quiera, él se ilusiono con que su regalo de santa ese año fuera un carro a control remoto, que en esas épocas estaba de moda y que era la sensación, el nombre de ese juguete no se me olvidara era el  ricochet.

Ese carro era la maravilla y la punta tecnológica en carros de control remoto en esos tiempos, ya que presumía ser todo terreno, cosa que después mi hermano se dio cuenta de que no.

Ese dia mi hermano menor le dijo a mis papas que eso le pediría a santa, pero mis padres al ver el precio trataron de persuadir con excusas a mi hermano que Santa no cree que pueda llevarle ese juguete tan caro, recuerdo que después de una rabieta de mi hermano en mero súper papa, cedió, esa misma noche ya no recuerdo si en el supero o en la casa mis papas me contaron el origen de santa, por lo que me dijeron que le comprarían el juguete a mi hermano menor, pero para eso a mí no me podían comprar el muñeco y la lancha, solo me comprarían el muñeco, por lo que después de asimilarlo y comprenderlo con trabajo accedí.

La navidad llego, los regalos llegaron, la cara de mi hermanito llena de felicidad, lo que él quería llego, yo al menos tenía mi figura de acción y a mi  primo igual le regalaron el suyo por lo que estaba feliz como todo niño jugando.

El dia 26 de diciembre, una vez en casa todos los niños de la colonia salían a enseñar lo que santa les había traído, mi hermano fue el centro de atención por su coche todo terreno, por lo que todos querían jugar con él. Eso paso en la mañana ya por la tarde un vecino, que no quiero decir su nombre pero es uno medio peloncito en esos tiempos, que era amigo inseparable de mi hermano el más pequeño fue a la casa a jugar, vio el coche y se puso a jugar, como mi hermano se la paso dice y dice que era todo terreno, el otro niño pregunto que si flota en el agua y fue haya donde nos dimos cuenta que el juguete era publicidad engañosa, porque de un recorrido en la bañera no se recuperó.

Como todo niño mi hermano menor lloro, ya que no le duro ni un mes el juguete tan valioso, pero ahora solo es una anécdota más de las historias que se cuentan cada navidad y espero que pueda seguir así.