Messi sofoca la revolución granadina

Artículo escrito por Guillermo Fernández.

El FC Barcelona se impuso por 5-3 al Granada en un encuentro en el que los de Abel plantaron más cara de lo esperado y en el que Leo Messi tuvo que volver a desequilibrar la balanza a favor de los suyos.

El encuentro se puede dividir en dos partes bien diferenciadas. En la primera los de Pep Guardiola fueron dueños y señores del partido y el Granada estaba a la deriva. Los andaluces llegaron al Camp Nou sin demasiada intensidad ni ganas de hacer daño. Los blaugrana por su parte, con el modo ahorro conectado tenían suficiente para sacar un resultado cómodo al descanso. Cuenca fue protagonista en la primera parte. El canterano, que seguramente pelee con su compañero Tello por un puesto en la selección olímpica, sigue siendo una de las primeras apuestas de Pep Guardiola en el once inicial esta temporada, gozando de un protagonismo inesperado a principios de la misma. Así, en los minutos cinco y diecisiete, el joven extremo se internó por banda izquierda desbordando a cuantos adversarios le salieran al paso y puso dos buenos balones que Xavi tras pase de Messi y el propio Leo introdujeron a la red respectivamente. Antes del descanso los locales lo siguieron intentando pero sin perder la cabeza, debido al absoluto control de la situación que tenían.

Pero en la segunda parte todo cambió. La reprimenda de Abel debió ser interesante y sus futbolistas salieron con otra predisposición. Aumentó el descaro y la intensidad sobre el campo. Esto sorprendió al Barça, que pensaba pasar una segunda parte tranquila, como muchas de las que ha tenido en el Nou Camp en los últimos años. de este modo, Mainz, en el 55, puso el 2-1 con un buen remate de cabeza tras una falta lateral. El gol hizo crecer aún más al Granada y, con ello, a Dani Benítez. El extremo andaluz no está haciendo su mejor temporada pero ayer en la segunda parte le hizo un traje a Alves. Suya fue la jugada del segundo gol en la que el brasileño cometió un penalti que Siqueira se encargó de transformar. Y en este momento apareció Messi. Pese a que alguna casa de apuestas se empeña en no darle el favoritismo por el balón de oro, el argentino es de otro planeta.

Cinco minutos después del gol de Siqueira, recogió un pase de Alves y con una vaselina batió a Julio César para darle la tranquilidad al Nou Camp y, de paso, a sus 24 años, pasar a ser el máximo goleador de la historia del club. Casi nada. Tello en el 82 y el propio Messi cuatro minutos más tarde sentenciaron el encuentro. Aún quedó tiempo para que Dani Alves cometiera un segundo penalti y fuera expulsado. Siqueira lo anotó a lo Panenka en una noche en la que sólo Leo Messi ensombreció su gran partido.

De este modo, el conjunto blaugrana mete más presión al Real Madrid en la carrera por el liderato mientras que el Granada puede salir satisfecho de su visita al Nou Camp a pesar de la derrota.