Yo también tengo derecho a tener mi nivel de ingenuidad, para poder subsistir. Debe ser el espiritu navideño que me invade.
Digo que me parece interesante, porque, a diferencia de otros conceptos manidos en este tipo de literatura, aporta un elemento fundamental, muy sencillo, que en resumen consiste en la capacidad de ver las cosas de otra manera. Esto, no sé si por genética generacional o porqué narices, me gusta.
En este momento de crisis económica, se manifiesta muy claramente que en su substrato subyace una crisis de ideas, un modelo obsoleto de entender el sistema y sus reglas de juego pertenecientes a un Océano Rojo por el que resulta difícil navegar.
En los océanos rojos, los agentes del sistema tratan de superar a los rivales arañando poco a poco cuota de mercado. Conforme aparecen más competidores, las posibilidades de beneficios y crecimiento disminuyen, los productos se estandarizan al máximo y la competencia se torna sangrienta ( de ahí el color rojo de los océanos).
El “ganar a toda costa”, consigna por la que siempre se ha regido el mercado, es en estos tiempos unidimensionales y ultraneoliberales, no es sólo una consigna, sino el eje sobre el que gira todo el sistema. Ya no valen los elementos atenuadores y reguladores de tipo social impulsados por los Estados desde la 2º Guerra Mundial.
A partir de ahora el bienestar social se obtendrá cuando el excedente sea suficientemente grande para colmar los estratos superiores y abante (sólo por derrame) a los inferiores, no existirán correctores públicos que actúen como vasos comunicantes o bombas de achique durante el camino.
Si no está en nuestras manos poder cambiar esta lógica infernal en la que hemos entrado, si que podemos intentar buscar Océanos Azules en nuestro quehacer diario.
En los proyectos que intentemos poner en marcha deberíamos partir de una lógica distinta de la que ha movido el sistema hasta ahora, y no me refiero sólo a la pura y sórdida especulación financiera, sino a los negocios llamados productivos.
¿Es cierto, como afirman algunos, que en realidad, todos los océanos rojos, fueron en su momento, océanos azules.…...al inicio?.
Pensar que el hecho, por ejemplo, que Henry Ford construyera un mercado inexistente en su momento, implica que en su esencia subyacía el modelo de Océano Azul es, desde mi modesta opinión, no entender nada.
Mi visión de los Océanos Azules y por esto la metafora," me pone", es que para construir uno, es necesario que el modelo de negocio a emprender:
a) No sea generador de escasez, sino de abundancia.
b) Rompa con la lógica de la competencia y generalice la coopetencia.
c) No sea especulativo.
d) Cree o no cree nuevas formas, que su plantemiento rompa las reglas de juego existentes.
e) Que sea Ego-altruista, yo gano tu ganas.
f) Han de ser rentables
Si no cumple la mayoria de estas reglas un proyecto no puede ser etiquetado de Océano Azul.
Aplicar esta reglas, romper con la lógica instalada, no es fácil y por esto muchos ejemplos de Océanos Azules estan equivocados.
Un buen ejemplo sería el de Muhammad Yunus
Imagination to the business:
Muhammad Yunus (Chittagong, 28 de junio de 1940), es un banquero y economista de Bangladés. Es el desarrollador y aplicador del concepto de microcrédito (ideado por el pakistaní Dr. Akhter Hameed Khan). Los microcréditos son pequeños préstamos concedidos a personas humildes que no pueden solicitar un préstamo bancario tradicional. Fundador del Banco Grameen, fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 1998, Premio Internacional Simón Bolívar en 1996 y con el Premio Nobel de la Paz de 2006 "por sus esfuerzos para incentivar el desarrollo social y económico desde abajo.
Grameen, no sólo actua en el llamado "tercer mundo", sino en el seno del "primer mundo" donde la crisis ha hecho estragos, en el centro de la megalopolis de New York.
Informa Núria Perez que : El Banco Grameen al inicio de la mega crisis, 2008, abrió puertas en la capital del capitalismo financiero New York y en sólo 3 meses concedió más de 350.000 dolares en microcréditos a 166 destinatarios y en 2011 ha inaugurado tres oficinas nuevas en Manhattan, Brooklyn y el Bronx y se está expendiendo por todo EEUU.
¿Como funciona?: Construyendo capital financiero y social al mismo tiempo, creando Comunidad.
En el modelo de Grameen America el concepto base es el de Grupo y Centro.
Grupo es una unidad de cinco empresarios, cada uno de ellos adquiere un préstamo para construir o ampliar un pequeño negocio. Un Centro se compone de varios grupos que se reúnen semanalmente con un director del centro para pagar los préstamos y hacer los depósitos de ahorro.
El "networking" es una noción esencial para los profesionales, la estructura del Grupo y el Centro proporciona la base para la creación de redes efectivas para los deudores, y posibilita su vinculación a recursos e ideas que de otro modo no estarían a su alcance. A través del Grupo y el Centro, los prestatarios comparten soluciones con los otros negocios, identificando oportunidades de crecimiento de las ventas, y proporcionando apoyo y estímulo tanto personal como profesional.
Además Gramen Bank America posibilita que los prestatarios que no tenían historial de crédito (muy iImportante en EEUU) antes de unirse a Grameen America ahora tienen puntaciones de crédito con promedios de 670. Además, los prestatarios con historial crediticio negativo están trabajando para mejorar su crédito a través de reembolsos de préstamos regulares
“En momentos de crisis la imaginación es más importante que el conocimiento” “El principio de la locura es pensar que haciendo lo mismo obtendremos resultados diferentes” Albert EinsteinPensemos en la creación de mercados en áreas que no están explotadas en la actualidad, y que generan oportunidades de crecimiento rentable y sostenido a largo plazo.
Esto no significa sólo invertir en negocios que tengan que ver con nuevas áreas, el medioambiente, la pobreza, por ejemplo, estos negocios se pueden enfocar de la misma manera que los tradicionales.
No basta con esto para entrar en un océano azul, para hacerlo, es necesario enfocar el negocio de forma distinta, y una manera es incorporar a tu ADN empresarial la fórmula Win Win como método para hacer que la competencia se torne irrelevante.
No sólo irrelevante sino que coadyuve a tu desarrollo y al suyo propio.
Hay océanos azules que no tienen nada que ver con las industrias actuales es decir, mercados completamente
nuevos, estos generaron el mayor porcentaje de las utilidades: el 61%, aunque la mayoría surge de los océanos rojos al expandir los límites de los negocios ya existentes. Estos, los negocios que apuntaron mayoritariamente amercados ya existentes, generaron beneficios netos del orden del 39%. (Harvard Business Review 2008).
Las tecnologías TIC permiten crear redes de valor estableciendo vínculos entre actores que hasta ahora no era posible explotar con beneficio mutuo, lo que les obligaba a competir.
Los océanos azules se pueden encontrar sin necesidad de tecnología sólo con integrar el valor y el coste. Si sólo nos centramos en innovaciones tecnológicas quizás estemos apostando por algo que el mercado no está en condiciones de incorporar.
Innovar en valor es alinear innovación con utilidad.
No debe ser suficiente centrarse en la curva de valor del sector al que nos dirijamos como modelo estándar, dando más por menos, por política de costes o de márgenes. Es necesario crear una nueva curva eliminando perfiles del modelo de partida y creando nuevos perfiles.
Y el verbo se hizo negocio y habito entre nosotros, Google 1:1, “business is business”
"Parole, parole, parole" la vieja canción de 1972 de Mina adquiere nuevos significados.
El nuevo capitalismo ofrece ejemplos de cómo se puede generar negocio con una materia prima que hasta ahora sólo se transformaba en producto comercial tras largas elaboraciones literarias en forma de libro o publicación periódica (diario, revista) “las palabras”. Google en el primer trimestre de 2011 gano casi 10 000 millones de dólares, gracias a la venta de "palabras clave".
¿Ha construido Google un mercado azul?, la respuesta, para algunos, es sí, lo que no implica que no esté exento de peligro. Google ha creado un mercado lingüístico global y plurilingüe.
Google controla los movimientos lingüísticos en tiempo real. Ha sido el primero en descubrir el océano azul de las “palabras” y encontrar en él una enorme fuente de riqueza, para su explotación desarrolló herramientas y algoritmos sofisticados.
Google es una autentica Bolsa de palabras que ofrece un foto bastante exacta de los movimientos semánticos a nivel mundial (ver post anterior: e-mociones, recuerdos y Geopolítica 2.0) .El valor de las palabras en esta Bolsa está vinculado a su valor publicitario y a las visitas que generen a la webs de los compradores y cambia en función de variables como la estación del año, la palabra “esquí” adquiere un valor superior en invierno y “bikini” en verano, otras son atemporales como “sexo” o “gratuito”.
Google ha extendido el dominio del capitalismo a la lengua trasformando las palabras en mercancía y creando sobre la especulación lingüística un modelo comercial muy rentable.
Pero si repasamos las condiciones que desde mi punto de vista deberia cumplir un Oceano Azul, Google no lo habria logrado. Pero mira por donde en el 2008, con motivo de su decimo aniversario, se inventa el concurso de ideas Proyecto 10 elevado a100 para ayudar a nuestro planeta.El proyecto 10 elevado a 100 es una convocatoria de ideas para cambiar el mundo y ayudar a la mayor cantidad de personas posible.
Google creo algo nuevo: Nunca antes tante gente tuvo la posibilidad de tener la información, las herramientas y la manera de llevar a la práctica ideas buenas. Ni que tanta gente, de distintas escalas sociales y laborales, se beneficie de tanta ayuda, ya sea en pequeña o en gran medida.
Como conclusión: Mejor encontrar Océanos Azules que seguir en los Rojos, pero sería conveniente hacerlo con modelos de sesgo social o que aporten un valor colectivo o sectorial no especulativo. Esto, en los tiempos que corren, si que es innovación.Felices Fiestas!!!!
Albert Pérez Novell