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Un grupo de congresistas mexicanos exigió al gobierno central poner coto a lo que denominaron...
“etnocidio cultural”, originado por la desaparición paulatina de los idiomas nativos de ese país.
Fueron los representantes del Frente Nacional de Legisladores del Sector Rural quienes solicitaron que, mediante la educación indígena, se logre revalorizar los idiomas mexicanos y dotarlos de sus propios sistemas de escritura.
La traducción de la Constitución Política de México al mixteco y zapoteco, fue considerada como muy importante por el líder del grupo legislativo y presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Senado de la República, Heladio Ramírez López.
“El objetivo es preservar y promover la enseñanza de las lenguas que quedan en el país, revitalizando los idiomas mexicanos que han resistido 500 años de asedio e intentos de extinguirlos”, indicó.
Asimismo, Ramírez López consideró relevante que el texto de la Constitución tome en cuenta la realidad social.
“A 200 años de ocurrida la independencia y a 100 de la Revolución, es evidente el drama que atraviesan las comunidades indígenas donde el analfabetismo, desigualdad, pobreza y los más bajos niveles de vida, siguen destruyéndolos como pueblos”, puntualizó.
Añadió que para los indígenas, olvidar las lenguas nativas es como morir de a poco y para México es ir perdiendo la parte viva de su cultura, además de diluir la identidad.
El senador por el estado de Oaxaca denunció que lo que no pudo lograr la conquista y el régimen colonial, lo está logrando el vértigo de la globalidad, lo que se refleja en que la identidad mexicana cada vez pierde sus fuentes originales.
Peligro de extinción
“Cada censo encuentra a los indígenas más disminuidos. Una vez el 100 por ciento de los mexicanos hablaban con orgullo sus propias lenguas, hoy apenas el cinco por ciento lo hace”, lamentó.
Heladio Ramírez López estimó que de las 64 lenguas mexicanas que aún sobreviven, se espera que en las próximas dos décadas ya no haya ningún hablante de 34 de estos idiomas mexicanos que se habrán convertido en lenguas muertas.
“Hoy mismo, detalló, el Pápago cuenta con sólo 300 hablantes, el Ixel con 183; el Kiliwa con 79; el Cochimi con 77 y el Aguacateco con apenas 55.
En el mundo existen más de dos mil 500 lenguas indígenas que se encuentran en serio peligro de extinción inmediata. En promedio desaparece una lengua cada dos semanas, lo que significa la muerte de pueblos atrapados por la pobreza.
Fuente: servindi.org