¡mi bebé come solo!

El baby-led weaning (BLW) supone la alternativa más natural a las papillas.

Estamos viviendo una pequeña revolución sobre cómo criar a los niños. Por fin nos estamos dando cuenta que no hay nada mejor que la crianza con apego. No es un tipo de crianza nueva, simplemente se le ha dado un nombre a esta forma de criar que apuesta por el contacto y al volver a aceptar la grandeza de las cosas naturales, como el porteo, la lactancia materna o el colecho. También es común en esa corriente seguir el sistema baby-led weaning (BLW) cuando el niño comienza a tomar algo más que leche, ya que, se entiende que es una forma más natural de crear hábitos saludables y dar la oportunidad al bebé de experimentar entre formas, texturas y sabores de los alimentos.

Baby-led weaning se podría traducir como alimentación complementaria a demanda. Se caracteriza por que se le ofrecen al bebé los alimentos a trozos, de manera que sea el propio niño el que los elija, agarre, se los lleve a la boca y decida qué cantidad comer, en lugar de darle papillas o purés cucharada a cucharada.

LOS TRES REQUISITOS PARA EL BABY-LED WEARING o BLW

Según recomendaciones de la OMS, la lactancia materna exclusiva se debería mantener hasta los 6 meses. En los primeros momentos en que empezamos a introducir la alimentación complementaria, la leche materna todavía tiene un gran peso nutricional en la dieta del bebé. Ya que la lactancia materna sigue siendo el alimento principal, es normal y no nos debe preocupar, que al empezar con esta práctica el bebé, al principio, sólo chupe, estruje y succione, y que coma porciones muy pequeñas.

Cada bebé es diferente; algunos pueden estar preparados para consumir alimentos distintos a la leche a los cinco meses y medio, otros a los ocho meses. Las claves que indican que el niño está listo para iniciar la alimentación complementaria son las siguientes:

• Puede mantenerse sentado y siente curiosidad para probar los alimentos.
• Es capaz de coordinar sus manos para coger un alimento y llevárselo a la boca.
• Ya es capaz de tragar alimentos sólidos y no los expulsa con la lengua.

El tipo de alimentos que se pueden ofrecer en el BLW es muy amplio, pero es importante que sean productos blandos y fáciles de agarrar, así como evitar los trozos demasiado pequeños. Por ejemplo, se le puede ofrecer patata hervida, trozos de verduras cocidas (ramitos de brécol, zanahoria, judías verdes...), trozos de fruta, pan, pasta de tamaño grande, queso fresco, albóndigas, croquetas, trozos de aguacate...Trozitos largos aproximadamente como un dedo de un adulto para que lo puedan agarrar bien y llevárselos a la boca.

El BLW y la alimentación tradicional con papillas no son opciones excluyentes. Podemos darle a nuestro hijo un puré y en otro momento ofrecerle un trozo de zanahoria hervida o un pedazo de plátano.

VENTAJAS DEL METODO BABY-LED WEANING (BLW)

• Permite al bebé comer desde el principio en la mesa familiar, relajando la sensación de control y creando un ambiente distendido que crea una relación placentera con la comida. Siempre mirando de ofrecer lo mismo que como el adulto. Es muy importante no dejar nunca al bebé solo en la comida.
• El bebé puede explorar formas, texturas, sabores y explora de manera libre, desarrollando los sentidos. Le permite conocer cada sabor y textura por separado (cosa imposible con las papillas), lo que favorece que consuma y acepte todo tipo de alimentos con más facilidad. Fomentamos que el niño avance a su ritmo controlando su apetito y sensación de saciedad, escoge instintivamente los alimentos que conforman una pauta equilibrada).
• Trabaja la psicomotricidad fina y es un muy buen momento para fomentar hábitos alimentarios sanos.

DESVENTAJAS del BLW

• Requiere más tiempo, porque el bebé come a su ritmo. También se ensucia más.
• Los padres tienen mayor miedo al atragantamiento, aunque hay poco riesgo si el bebé está preparado (si presenta las tres claves ya comentadas y se escogen y trocean los alimentos adecuadamente) y se halla en todo momento en compañía de un adulto.