“mi carnet de la patria”

“MI CARNET DE LA PATRIA”

Este instrumento revolucionario, vendido como la maravilla gubernamental del actual gobierno de Venezuela, ha sido promocionado con un furor que miles de actividades se han suspendido; impulsando así, que la gente busque su “Poder Mágico” en las dependencias del Estado, organismos ministeriales y hasta en las universidades donde sus autoridades son impuestas por el gobierno. Caso de universidades experimentales.Su pasmoso poder, ha sido tan promocionado, que a la final seducido por la grata fragancia de lo sobrenatural, caemos en su búsqueda con frenesí. Sin saber a ciencia cierta lo que puede representar este instrumento y su capacidad de convertir nuestra existencia en un mundo extraordinario y feliz. Nos imaginamos que conjuntamente con el Ministerio de la Felicidad y otros inventos de la “revolución bonita” transformaran el hambre y la pobreza, en éxito y bonanza.Son miles de expectativas que han girado alrededor de su origen “místico”, se consigue trabajo, logra que llegue a los hogares los CLAP y teléfonos celulares que estarán en ellas para niños y adultos. Te garantizan la entrega de títulos universitarios, y hasta becas por doquier. Es fantástica esta innovación al mismo estilo de “Merlín el Mago”. La patria con su carnet, logrará superar la crisis económica, adquiriremos medicinas en los hospitales y en nuestras farmacias, como la aparición del dólar preferencial, la libertad de presos políticos y en algunos casos el regreso a estas de algunos que se escaparan vendiendo su conciencia.

Es así, que cuando lo obtuvimos lo colocamos con emoción ese mismo día bajo la almohada, como lo indicaban sus instrucciones de uso, esperando que desde ese momento nos acompañara un sueño reparador y un amanecer en el mar de la felicidad, que ahora según el “líder presidente”, queda en Venezuela. Tales expectativas de esperanzas e ilusiones arroja nuestro carnet de la Patria, que recordamos que en tantos años, con misiones, bolsas de comida, con la Pdvsa del pueblo, con los CDI y CTI, como la anarquía social, política y moral que carcome el país, este “plástico” crea la nueva Venezuela y “al nuevo revolucionario”. Quienes hoy logramos divisar con exactitud nuestro estamento político, asumiendo que de espaldas están de los ciudadanos, las familias y las comunidades; generando así, la pérdida del “espíritu de Nación” y con esto, logra prevalecer en todos sus actos, el hecho de no lograr brindar realmente acciones y eventos que consoliden realmente un momento de fortuna y éxito en el pueblo venezolano. Mientras, el Hambre y la muerte se profundizan cada vez más en el suelo bolivariano.Finalmente, seguimos buscando en las “mágicas soluciones” la búsqueda de una salida a la crisis venezolana, pidiendo a nuestro Dios, que sus tiempos sean los nuestros. Por otro lado, el deseo y el éxito deseado desde nuestros corazones en la insistencia de un “David” en su labor de esculpir en la historia de la OEA, la salida de un “Goliat” que luce todopoderoso.

Dr. José Ernesto Pons B/@joseponsb/Estado Psicosocial Latinoamericano.
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