Pero éste lo cogí. No pude resistirme. Fue un día que volvía del cole con las niñas y lo vi al lado de un contenedor. Como estaba cerca de casa y era chiquitito me lo llevé.
No me digas que no tiene una forma peculiar, con todas esas tablas atravesadas! al principio pensaba utilizarlo para dejarlo en la terraza y poner alguna plantita o algo así. Incluso le apliqué una capa de barniz, pero no acababa de verlo, así que se quedó ahí, durante varios meses.

Y un día la inspiración llegó. Primero pinté la parte frontal de gris oscuro y los laterales blancos. Después atornillé cuatro colgadores en el frente y a los lados y le puse varios ganchitos. ¿Ya lo adivinas?


Exacto! un perchero! donde antes estaban mis bolsos amontonados, ahora están ahí, tan ordenaditos.



Y todavía no me ha dado tiempo a poner ganchos más pequeños para collares y pulseras, pero todo llegará. Espero que te haya gustado :)
