● Título: Mi chica fantasma
● Título original: My so-called afterlife
● Autora: Tamsyn Murray
● Serie: My so-called #1
● Publicación: Noviembre 2011
● Editorial: Maeva Young
● Páginas: 222
● Precio: 14’90 €
Cuando este libro llegó a mis manos me transmitió muy buen rollo; tal vez tenga una portada algo feúcha (tsk, a mi no me disgusta del todo, la encuentro divertida y perfecta para el público más joven), pero su lectura prometía unas horas de lo más entretenidas. Aunque no se trata del libro del año ni cuenta una gran historia, lo cierto es que disfruté mucho leyéndolo, me pareció fresco, divertido y ameno.
Aunque se trata del primer libro de una trilogía, dejadme aclararos que se puede leer perfectamente de forma independiente (de hecho, no está previsto que el resto de libros se publiquen en España). Además, el final de este libro es completamente cerrado, así que no tenéis por qué preocuparos.
Me encanta Lucy Shaw. Aunque la sinopsis prometía entretenimiento, empecé el libro sin grandes pretensiones y quedé encantada al conocer a nuestra protagonista. Más allá de su atípica vida, la forma en que nos cuenta su historia hace que las páginas pasen sin que nos demos cuenta. A lo largo de la lectura me he reído más de una vez con sus ocurrencias y comentarios (tiene un toque de teatrera y una lengua afilada que me encantan).El resto del elenco queda en un segundo plano y, aunque se nos presentan como unos personajes con los que el lector puede empatizar rápidamente, los he encontrado poco trabajados. En cuanto a la historia de amor (que la hay), os advierto de que no es nada muy allá; previsible y muy suave, pero es algo que cabe esperar en un libro pensado para lectores muy jóvenes (+12).
Uno de los puntos más fuertes del libro es la narración fresca y desenfadada de Tamsyn Murray; con ella, ha conseguido que la lectura de su libro sea increíblemente amena, ligera y divertida. Aunque la historia que nos cuenta es sencilla, la autora ha sabido cómo combinar tragedia y humor de una forma refrescante, haciendo así de su obra algo más complejo que, personalmente, me ha dejado con un muy buen sabor de boca.
· Con la colaboración de Maeva Young ·