Mi encuentro con Marilou

Taillandier es un conocido pintor de más de sesenta años. Sin embargo, a pesar de su éxito, decide dejar de pintar. Presa de la depresión, se va de casa sin dar una explicación a su familia y empieza a viajar. Durante su periplo conoce a una adolescente, Marylou, a la que su  madre ha rechazado y que se siente perdida. La joven y el hombre que no puede más deciden pasar un tiempo juntos. Acaban viviendo como padre e hija en la paz y tranquilidad de una casa alquilada, ayudándose mutuamente, hasta que sus vidas vuelven a cobrar sentido.

- YA EN LOS CINES-

Una maravilla de película, entre a la proyección sin saber que me iba a encontrar y salí encantada, una película que no volvería a ver una y otra vez, incluso, estoy contando los meses para tenerla en Dvd en mi filmoteca.
La historia comienza cuando la inspiración se acaba, cuando te cuesta despertarte y estas cansado de todo, la sensacion que el protagonista principal da, es que pronto va a hacer alguna locura.
Taillandier es un personaje complejo, con muchas manías peculiares, cosas de mayores diría yo, pero conforme avanzaba la pelicula me di cuenta de que sus obsesiones eran parte de su carácter.
El camino quiere que se encuentre con Marilou, una adolescente algo peculiar, cuya personalidad es la opuesta a la del viejo pintor, y la relación que se va forjando entre ellos, es muy bonita y como se terminan salvando el uno al otro me ha enternecido.
Los diálogos los destacaría por encima de la trama, van desde los mas simples hasta los mas divertidos, a destacar las conversaciones que suceden en cierto restaurante.
En una película como la vida misma, llena de tópicos pero que los actores convierten en magia, no quería que se terminase, que la palabra fin apareciera en la pantalla, quería seguir ahondando en conocer a Taillandier y a Marilou.
No es de ahora que el cine francés me guste mucho, es un cine con muchas buenas cualidades que siempre acaba por sorprender al espectador, en esta ocasión, lo que realmente me llamo la atención, es la sensibilidad con la que el director trata un tema tan delicado como son los malos tratos tanto físicos como psicológicos que muy a nuestro pesar están a la orden del día en el mundo, pues bien, en "Mi encuentro con Marilou" lo hacen de manera sencilla, sin florituras, no engañando al espectador en ningún momento... El mar dicen que lo cura todo,y el director ha elegido un lugar junto a una playa de Francia para narrar gran parte de la historia, en una casita de lo mas modesta, ambos personajes curaran sus heridas y maduraran cada uno a su manera.
*Agradecimientos a la productora