Crítica: 7,162 Público: 7,431 España: S/C Rugoleor: S/C
Ficha:
Título Original: Milk
Director: Gus Van Sant
Guionista: Dustin Lance Black
Intérpretes: Sean Penn, Emile Hirsch, Josh Brolin, James Franco, Diego Luna, Alison Pill, Victor Garber, Lucas Grabeel
Productores: Dan Jinks, Bruce Cohen
Fotografía: Harris Savides
Música: Danny Elfmann
Montaje: Elliot Graham
Nacionalidad: Estados Unidos
Año: 2.008
Duración: 129 minutos
Edad: 13 años
Género: Biográfica, Drama, Histórica
Distribuidora: Universal Pictures International Spain, S. L.
Estreno: 09-01-2.009
WEB Oficial: Web Oficial de la película
Espectadores: 227.448
Recaudación: 1.373.150,86 €
Visitas: 0
Popularidad: 0,00%
Sinopsis:
Activista gay. Amigo. Amante. Unificador. Político. Luchador. Icono. Inspirador. Héroe. Su vida cambió la historia y su coraje cambió muchas vidas. En 1.977, Harvey Milk fue elegido concejal del Ayuntamiento de San Francisco, convirtiéndose en el primer hombre gay reconocido en ocupar un cargo público. No sólo significó una victoria para los derechos de los gays; supo crear coaliciones con grupos muy diversos, desde la tercera edad a los sindicalistas. Harvey Milk cambió la imagen del defensor de los derechos civiles. Antes de su prematura muerte en 1.978, se había convertido en un héroe para los estadounidenses.
Comentario:
Sean Penn da una vuelta a su sobradamente demostrado talento interpretativo dando vida a Harvey Milk, el primer cargo electo abiertamente gay dentro del sistema norteamericano. A Milk se debe también la transformación del barrio de Castro (San Francisco) en lo que hoy sigue siendo, un famoso barrio homosexual. Un film del no menos comprometido Gus Van Sant, que lleva a cabo la eficaz hagiografía de un pionero, donde tan solo chirría una esperpéntica aparición de Diego Luna.
Crítica:
10-01-2.009 – JOSU EGUREN
Derecho civil
Maricón, desviado, pervertido sexual... probablemente estos y muchos otros fueron los insultos que recibió a lo largo de su vida el protagonista de esta segunda incursión en el terreno del biopic llevada a la pantalla por Gus Van Sant, un director militante que en esta ocasión abraza los postulados del cine comercial para abordar un problema candente en Estados Unidos: los derechos civiles de la comunidad gay.
Quizá los cinéfilos le hubiésemos agradecido una mayor dosis de riesgo al perfilar un retrato del primer cargo electo en declararse abiertamente homosexual, aunque probablemente Harvey Milk coincidiría con la voluntad del cineasta americano: el sacrificio de su vena artística (véase “Gerry”) en favor de una 'mayor visibilidad'.
Navegando en medio de los Scilla y Caribdis que acechan al cine de temática homosexual (cine de autoconsumo vs. frivolidad), Van Sant opta por una delgada línea recta que le lleva a fondear en buen puerto, no sin apuros, porque “Milk” bordea peligrosamente los acantilados de la estampita lasciva por los que se han despeñado innumerables intentos de beatificar cinematográficamente a personajes de la vida real. Y lo hace cargando las tintas en la versión política de un personaje que hubiese compartido billete con Rosa Parks.
Aún reconociendo que la lucha por los derechos de la comunidad gay fue uno de los puntos de partida de Harvey Milk, Van Sant nos recomienda abordar al personaje desde una perspectiva distinta, la del luchador incansable cuyo último objetivo fue hacer cumplir esa máxima que predica que 'todos los hombres somos iguales ante la ley' (las lesbianas eran tratadas como homosexuales de 3ª división).
Van Sant tampoco se arruga a la hora de poner el dedo en la llaga en los claroscuros de Harvey Milk (el outing forzado, los lobbies de poder...), lo que humaniza aún más a un personaje que camina por las calles de la ciudad de San Francisco, verdadera protagonista de la cinta junto a un extraordinario Sean Penn.