Mi opinión sobre la huelga general del 29-s

Como siempre ocurre, Gobierno por un lado y sindicatos por otro, arrojan cifras, comparaciones con anteriores Huelgas Generales, debates, etc., cuestiones que no entran en la raíz de la cuestión y creo que sería interesante indagar.
Hay quienes se han arropado en excusas para no secundar la Huelga, manifiestan desavenencias con los Sindicatos mayoritarios e inciden en las críticas a las que han sido objeto últimamente, solo quiero puntualizar que, al menos para mí, dichas excusas han sido realizadas por personas carentes de sentido de la responsabilidad, que no se han parado a pensar de lo que se puede conseguir o perder. Por mi parte dejo plasmada mi opinión, pero no entraré más en este tema.
Quiero hacer hincapié es en que esta Huelga General no puede compararse, ni por asomo, a las anteriores, estamos en circunstancias excepcionales, por lo tanto no vale comparación alguna y mostrar mi satisfacción por el seguimiento que ha tenido por parte de la clase trabajadora, sin embargo, los titulares de los periódicos “oficialistas” de uno u otro signo inciden en que la Huelga ha sido un fracaso, que no ha paralizado el país, etc. etc. Lo lamentable es que la prensa alternativa no tenga la misma difusión y que estos periódicos “oficialistas”, “servilistas” o condicionados puedan generar opinión, como intentaron hacerlo con anterioridad, manifestando que ésta sería un fracaso. PUES NO SEÑORAS Y SEÑORES, ESTA HUELGA GENERAL NO HA SIDO UN FRACASO.
No obstante, e incidiendo con la comparación de las anteriores Huelgas Generales, habría que modificar la ecuación: los condicionantes no son los mismos. Es decir, cada vez hay más personas con empleos precarios y temporales que, no secundarían la Huelga por temor a represalias por parte del Empresario. Hay menos confianza a la hora de ejercer un derecho fundamental como es el Derecho a la Huelga, y es que, hablando de Derechos, veo, absorto, como éstos menguan cada vez más, unos “legalmente” y otros siguen ahí pero tan solo quedan reflejados en papel.
Sinceramente, no creo que el Gobierno modifique ni una coma de los recortes laborales y sociales que ha acometido, de hecho, los titulares de hoy ya confirman la estrategia a seguir ninguneando o minimizando, desde los distintos medios, las reivindicaciones sindicales y ciudadanas. Sobre esto, reitero lo escrito en un párrafo anterior sobre los medios de comunicación “alternativos”, que juegan un gran papel a la hora de crear criterio, y otra cuestión de suma importancia, que son las Redes Sociales donde hay cada vez más personas que tienen la opción de comparar opiniones o artículos y establecer su propio criterio.
Ni que decir tiene que hay frases referidas a la actuación del Gobierno Socialista, que son sumamente significativas, frases como “para votar a una mala copia voto al original” o “qué buenos dirigentes se está perdiendo el Partido Popular”.
Creo que si el Gobierno hubiese dicho la verdad, hubiese sido más coherente, y tal vez, comprendido por las personas, comprendido aunque no aceptado, pero sería un tanto a su favor. Lo que no nos sirve a la clase trabajadora es decir que esta reforma es necesaria para nuestros intereses cuando sabemos que no lo es. Ha sido una estrategia de cara a los mercados, a los banqueros, al F.M.I., en definitiva, una estrategia que solo favorece a quienes han sido los responsables de esta crisis.
Resulta bochornoso que con MIS IMPUESTOS Y LOS DE OTR@S TABAJADORES Y TRABAJADORAS se hayan inyectado cantidades desorbitadas de dinero a la Banca, y que ésta, siga generando beneficios constantemente, aunque “estemos en crisis”.
Considero que lo que hubiese sido eficaz y consecuente con una ideología SOCIALISTA sería haber creado una Banca Pública que podría verse respaldada por el Capital donado a la Banca Privada y, consecuentemente, con los depósitos de la ciudadanía.
Por otro lado, queda claro que no hay intención de generar empleo, hoy desde la Presidencia del Gobierno se lanzan mensajes como: “a pesar de la crisis, España ha ganado cuota de mercado internacional”. Cuando tod@s sabemos que la única confianza que intenta ganarse el país es la confianza del Capital especulativo, para que pueda seguir especulando a sus anchas. ASÍ NO se genera empleo, y lo sabe todo el mundo, por muchos titulares que leamos, sabemos que NO.
Sabemos que el Crecimiento Económico de un País se mide por su P.I.B., y que el encefalograma del nuestro es totalmente plano, ni que repunta ni historias, aquí no repunta nada, décimas que fluctúan y que no son significativas para nada. Según l@s Economistas, la generación de Empleo se produce cuando el referido P.I.B. supera el 2%, y éste solo podría repuntar fomentando el consumo. Pero ¿quiénes pueden fomentar el consumo?, lógicamente la mayoría de las personas de un país, es decir: NOSOTR@S, pero si estamos con salarios que apenas nos llegan a final de mes, con contratos precarios, con empleo temporal, lógicamente, consumiremos menos, por lo tanto, la primera ficha del dominó que hay que empujar para que se produzca la reacción en cadena: la clase media, no solo no ha recibido ningún impuso, sino que ya se están asentando las bases para dejarnos totalmente inmovilizados.
Observamos que no hay intención de generar empleo, las rentas más altas son siempre las más beneficiadas y la clase trabajadora está más en precario, sabemos muchas cosas y a la hora de pasar a la acción much@s de nosotr@s nos quedamos rezagados o buscando excusas para no hacer nada. Estamos en un mundo tan sumamente superficial que solo creemos lo que nos quieren vender y no nos cuestionamos nada (por suerte, cada vez hay personas más críticas).
Considero de especial relevancia que en momentos como éste, donde el sector privado no genera empleo, debería ser el Estado quien asumiese el papel de empleador fomentando, por ejemplo, las Cooperativas, por un lado, y por otro reforzando a los municipios, ya que al ser la Entidad Pública más cercana a la ciudadanía es la más conocedora de sus carencias. No deberíamos seguir las instrucciones de Europa, al menos mientras ésta siga los dictámenes del Capital, y unir fuerzas con América Latina para encontrar las respuestas de actuación para la construcción de un Socialismo real y acorde con las necesidades de las personas en el momento actual.
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