Libros, cerveza y rock and roll.
Siempre estáis a mi lado,
en los buenos y malos momentos sin distinción.
Mi refugio, mi escondite, mi rincón.
Las horas bajas inundan mis ojos al verte
casi abandonado y sin atención.
Pero no nos llevemos a engaño
ni nos rindamos sin haber luchado.
Aunque deslucido y cubierto de maleza,
la chispa de rabia que fue tu origen
sigue latente presta a prender
cuando por fin los vientos soplen propicios.
El primer capítulo de un libro nuevo,
el olor de sus páginas al abrirlo;
el sabor de la cerveza favorita
surcando la garganta tras un duro día,
aliviando la congoja y liberando la tensión;
acompañado por los acordes cercanos
de una vieja canción de guerra.
Esta es la fuerza que me hace seguir,
que alienta la llama necesaria
para continuar adelante un día más.