
Recuerdo aquella sentencia con la que nuestro catedrático de Farmacología, en tercero de Medicina (hace ahora más años que los que pueda tener la Mari Castaña), cerró el año académico: "Ahora que ya sabéis Farmacología yo os digo: si cogiésemos todos esos medicamentos y los arrojásemos al mar, haríamos un favor a la humanidad y un gran perjuicio a los peces...".
Sea como fuere esa frase me impactó quedándome grabada en algún lugar de privilegio, entre mis recuerdos...
Es por eso por lo que, durante un viaje a Berlín, en el que decidí comprar mi primer pastillero, pensé que este en el que se Avisa de un Peligro, podría ser el más apropiado...
