Mi Primer Contacto con Lush

   Hace un par de meses asistí a un evento en Madrid organizado por la Revista Mujer Hoy, un Beauty Day, que se celebró tras la entrega de Premios Belleza. Se realizaron algunos talleres, entre los que figuraban los Talleres de Lush, yo estuve en el taller de bombas, realizamos la bomba Big Blue, os podéis imaginar, era difícil formar parte de un taller, casi todas las personas que asistimos queríamos formar parte de uno. Yo me quedé con las ganas de disfrutar del taller de mascarillas frescas, he oído hablar tan bien de éstas que quería probarlas. Y por supuesto, fueron tan amables de ofrecerme un tarro con la mascarilla que tenían allí expuesta, la Mascarilla Anti-Catástrofe, así que me vine a casa con los dos productos, la Bomba Big Blue y la Mascarilla facial Anti-Catástrofe.

   Bomba Big Blue.
   La verdad es que es más sencillo de lo que yo pensaba, su elaboración, una vez dadas las pautas a seguir por el personal de Lush, no tenía mayor complicación. Éramos muchos alrededor de la mesa, y apenas podía realizar fotografías, y muchas salieron movidas de lo apretadas que estábamos todas por allí, pero he podido salvar esta imagen en la que aparecen los ingredientes que usamos en la elaboración de las mismas: Bicarbonato de Sodio, Ácido Cítrico, Sal Marina Gruesa, Sal Marina Fina, Perfume, Alga Arame, Aceite de Limón, Aceite de Lavanda, Absoluto de Algas, Eugenol, Geraniol, Limoneno, Linalool, Color 42090, Color 1914.

   Dos de las integrantes del grupo realizaron las mezclas de los ingredientes indicadas por el personal de Lush y después nos repartieron a todos los moldes indicándonos como debíamos mezclar los ingredientes para que el resultado fuera el mismo. El molde se componía de dos semiesferas, que una vez rellenadas de producto según indicaciones, debíamos unir y dejar durante al menos 12 horas para que se formase la bomba de baño. Y este fue el resultado:

   Una Bomba de Baño que Lush nos recomienda usar en esos días en los que añoras unas merecidas vacaciones pero no te lo puedes permitir. Esta bomba de baño, cuando entra en contacto con el agua, el agua de la bañera toma un tono azul verdoso que recuerda al agua del mar, de hecho en su formulación contiene sal del Mar Atlántico y alga Arame Japonesa que es muy buena para suavizar la piel. Mis hijas alucinaron al ver como la bomba a medida que se disolvía creaba esas burbujas chispeantes y se teñía el agua, al mismo tiempo que se hacía visibles las algas. Además desprendía un agradable aroma que es cierto, si cerrabas los ojos te podías imaginar en las aguas del Océano. ¡¡Y eso no es todo!! Además en su formulación contiene aceites esenciales de limón y lavanda, que ayudan a focalizar las ideas y relajar la mente, os podéis imaginar, la relajación es total y absoluta.
   Esta bomba contiene 200gr y su precio es de 5,10€.

     Mascarilla Anti-Catástrofe
    Como os dije anteriormente, yo no pude asistir a este taller, con lo cual no os puedo dar una descripción del mismo, pero si os puedo hablar de lo maravillosa que es esta mascarilla, y lo contenta que estoy con ella.
     Tiene un tono morado, debido a los arándanos frescos(antioxidantes) y al polvo de calamina(calmante) contenidos en su formulación.
   No es necesario esperar a que nuestra piel sufra una catástrofe para usarla, aunque su nombre así lo indique, desde Lush nos recomiendas usarla de forma preventiva.
   En el caso de que nuestra piel tenga tendencia a irritarse y descamarse, nos recomienda usarla dos o tres veces por semana, yo no tengo problemas de este tipo, pero la usé dos veces por semana, y mi piel lo agradeció bastante. Con esta mascarilla proporcionamos a la piel una buena ración de vitaminas frescas, a lo que hay que sumar, la suavidad proporcionada por el aceite de almendras y las algas, y la tonificación producida por el aceite de naranja.  Y además, por si fuera poco, al contener camomila también nos calma la piel.
     Los principales ingredientes incluidos en su formulación son:
 - Arándanos: Antioxidantes y desintoxicantes.
 - Calamina: Calma las irritaciones  al tiempo que absorbe el exceso de grasa.
 - Aceite de camomila: Calmante.
     Y lo mejor de todo, es que no contienen conservantes, motivo por el cual debemos conservarlas en la nevera y consumirlas en menos de tres semanas. La naturalidad de sus componentes es algo que también me llama mucho la atención, cuanto más natural mas sana y mucho mejor para nuestra piel ¿No?
   Debemos extender la mascarilla mediante un masaje suave y sobre la piel limpia, evitando el contorno de ojos y labios. La dejamos actuar durante 20 minutos, hasta que se seque y después la eliminamos mediante un masaje circular para quitar el grueso de la mascarilla, el resto de la misma la retiramos con agua tibia.
   Después sólo nos queda aplicar nuestra hidratante diaria, y la piel queda como nueva. Os la recomiendo, a mi al menos, me ha funcionado de maravilla.
   Se recomienda su uso de una a tres veces por semana. El envase contiene 75gr y su precio es de 9,25€.


   Su textura, aunque en la imagen aparece rugosa, es muy suave, se extiende sin problema, y tiene un aroma muy agradable. No me ha producido ninguna reacción en la piel, no me picó, ni me escoció, ni noté rojeces tras retirarla, lo único que he experimentado con su uso es una piel más suave, calmada,  con más luminosidad, y además con menos concentración de grasa en la zona T, es algo que ha llamado mucho la atención.
   ¡¡Sin lugar a dudas un 10 para estos dos productos de Lush!!
   Gracias por leer y comentar. Raqueleita.