Mi primer… dia en Londres

Me desperté en una habitación nueva, mi madre ya no estaba. Se había ido porque su vuelo salía muy temprano y solo recuerdo que se despidió mientras dormía  que incluso me pareció un sueño. Me costó algunos minutos entender que estaba en Londres, yo sola… Esta vez completamente sola ante el peligro. Y justo en ese momento me dije “¿Y ahora?” Reconozco que sentí un mix de felicidad, tristeza y miedo extraño. Me sentía feliz de estar en la ciudad de mis sueños, era muchísimo tiempo que quería estar aquí, pero al mismo tiempo estaba triste, echaba de menos a mi madre, mi casa, mis amigos…TODO! Y entonces llegaba el miedo a lo desconocido, no sabia que hacer.

Así que decidí vestirme, preparar mis maletas y dirigirme a mi habitación final, como te dije la primera noche habíamos reservado una doble junto con mi madre. Tenia muchísima curiosidad de conocer a mis compañeras de habitación. Esperaba que ellas llevaran suficiente tiempo viviendo aquí para poder aconsejarme en mis próximos pasos, además tenia mil preguntas que hacerles y esperaba que ellas me pudieran resolver. También tenia la esperanza de que fueran extranjeras para así poder hablar en ingles con ellas.

Una vez me entregaron las llaves en la recepción, me dirigí a la nueva habitación. Menos mal que se encontraba en la planta baja, sino no sé como hubiera hecho para subir por las escaleras con mis maletones! Llegué a la habitación, abrí la puerta y ahí estaban ellas. En cuanto me vieron fueron súper majas, me recibieron con una sonrisa y un caluroso ”¡Holaaaa!!” Mi primera expectativa no se cumplía, eran ambas españolas! Aun así estaba contenta, se presentaron, me mostraron cual era mi cama y armario, me contaron como funcionaba el hostel y me explicaron que habían llegado hacia una y dos semanas. Mi segunda expectativa incumplida, eran tan nuevas como yo!!

Empecé a deshacer mis maletas y a colocar todas mis cosas en su lugar. Este iba a ser mi nuevo hogar y quería que fuera lo mas acogedor posible. Ellas de mientras estuvieron en la habitación conmigo y de mientras, me contaban sus anécdotas de los primeros días. Cuando terminé, ellas estaban listas para ir a repartir CV y me invitaron a salir con ellas para ir juntas y que así el día se hiciera mas llevadero. Yo seguía un poco triste, a lo que les agradecí la invitación pero no me apetecía salir. Solo quería quedarme en el cuarto, escuchar mi música (si si fui tan loca que me lleve un radiocassette y cd), mirar las fotos de mi familia y amigos (si… También me traje un súper álbum lleno de fotos) y probablemente, entre una cosa y la otra, quería llorar!! Me apetecía muchísimo llorar de la pena que me daba haberme separado de los míos.
Mi suerte fue, que a pesar el gran plan que tenia en mi cabeza, las chicas no me dejaron llevarlo a cabo. Literalmente me obligaron a vestirme y me llevaron a la calle! Desde ese momento comprendí que había encontrado a mis London sisters. La verdad que a día de hoy les tengo que agradecer tanto… Fueron mi gran apoyo!

Ese día me dediqué a comprar la SIM, imprimir mi CV y caminar un poco por el centro para entregar CV. Tengo que reconocer que las sisters me ayudaron con la SIM ya que yo no estaba en grado de poder hablar ni entender a nadie! Ahí me di cuenta que los excelentes que sacaba en la escuela no me servían de nada… Que desilusión!

Al final el día fue muy productivo. Llegué al hostel que estaba súper cansada y ademas, tenia un hambre de lobos, ya que comimos solo un Mc Pollo del Mc Donalds (en su día costaba solo 1 pound!). Nos hicimos la ducha, bajamos a cenar al comedor del hostal y acabamos la noche en la living room donde conocí a muchos otros españoles que vivían allí.

El punto positivo es que algunos llevaban mucho tiempo y trabajaban, eso me hizo sentir mejor porque sabia que cuando les cogiera mas confianza, les podría preguntar todas mis dudas! :) Así que, después de un gran y fatigoso día, me fui a dormir mas feliz que una perdiz! Y lo mejor, es que estaba súper motivada para el día siguiente.

MORALEJA: Aunque te sientas triste los primeros días, sal a la calle, haz turismo y absolutamente, no te quedes cerrada en casa y pensando en tu vida en España. Ah, y recuerda, vivir con españoles no tiene porque ser negativo, al inicio se agradece tener a paisanos que te ayuden!

¿Y tu, que tal fue tu primer día en la ciudad? ¿Te sentiste como yo o enseguida te hiciste con ella y te sentiste como en casa?