A principios de junio os explicaba mi rutina facial diaria de las mañanas. Hoy os muestro mi rutina facial por las noches. Algunos productos son un básico de mi tocador desde hace mucho tiempo y otros los he incorporado en los últimos meses.
En primer lugar, y desde hace más de cuatro años, me desmaquillo con el agua micelar Sensibio de Bioderma. He probado muchas otras y, hasta el momento, no hay ninguna que me haya convencido lo suficiente como para sustituirla. Retira perfectamente el maquillaje, no irrita, es hipoalergénica y no contiene parabenes ni perfumes. Algunas noches, si tengo la piel más grasa de lo habitual, utilizo el agua micelar Sébium, pero no la puedo emplear a diario porque me resecaría demasiado la piel.
Una vez retirado el maquillaje me lavo la cara con el gel limpiador Sensibio DS. Por mi tipo de piel, mixta y con tendencia acnéica, a temporadas sufro de dermatitis. La combinación de granitos y dermatitis es complicada, sobre todo cuando se ponen de acuerdo en aparecer. Por eso, por la mañana utilizo una espuma más específica para el acné (en este momento la de Lullage) y por la noche un limpiador muy suave y sin jabón como Sensibio, que evita la aparición de los agentes que pueden causar la dermatitis. Este gel lo conocí hace unos años y, a pesar de que lo he ido alternando con otros, siempre lo acabo volviendo a usar.
Por la noche, no acostumbro a ponerme ningún tónico. En su lugar, vaporizo un poco de agua termal de Avène y le añado tres gotitas del aceite reequilibrante de Loto de Clarins. Este aceite, al que le dediqué una entrada, tiene un aroma delicioso y muy relajante, ideal para preparase antes de dormir. Está compuesto de extractos cien por cien puros de plantas y ejerce una acción astringente y purificante de las pieles mixtas o grasas.
Por último, aplico la crema hidratante. Por la noche empleo la misma que la de día, ya que no tiene filtro solar. Desde hace unos meses estoy probando el Sérum 360º de Lullage, que es hidratante, anti-imperfecciones y además anti-arrugas. Como hidratante, en invierno creo que se me quedaría corta, pero ahora que el tiempo es más caluroso, me resulta muy ligera y agradable. Como ya he comentado varias veces, tengo pendiente una entrada sobre toda la gama de Lullage AcneXpert, pero prefiero esperarme un par de meses más, ya que al principio noté bastante mejoría, pero con el tiempo su efecto sobre mi piel se ha estancado.
Tres noches a la semana, en vez de utilizar el aceite de Loto, me aplico el renovador celular de Lullage por aquellas zonas del rostro donde me salen más granitos, que suele ser el área mandibular. Este gel semi-transparente tiene una actividad exfoliante y anti-inflamatoria por su contenido en ácido glicólico, ácido salicílico y ácido azelaico. Además, ayuda a eliminar manchas y cicatrices, y a alisar la piel. Al principio me daba un poco de miedo utilizarlo debido a su composición, ya que tuve una mala experiencia con la espuma Neostrata de ácido glicólico. Pero la verdad es que este producto no me ha generado ningún tipo de reacción adversa y al día siguiente de utilizarlo amanezco con la piel preciosa.
¿Cuál es vuestra rutina facial por la noche? ¿Habéis probado alguno de estos productos?