El negocio de los juegos de azar, encabezado por la lotería, es toda una industria que mueve millones de dólares al año. Muchas personas asumen que participar de este tipo de sorteos es la solución a todos sus problemas económicos.
Es tanto así, que la magnitud de esta industria es tal que solo en Estados Unidos para junio del 2012 tuvo ventas de 78 Billones de dólares.[1] Que si dividimos este monto de dinero entre la cantidad de personas que en ese momento habitaban en EEUU, le correspondería un promedio mensual de USD 20,891.03 durante todo un año. Un monto que representaría, para un grupo importante de la población, la totalidad de sus ingresos anuales.
En ese sentido, y dada la relevancia que tiene la lotería en una parte de la población, queremos tratar el tema sobre si realmente esta es la solución que deben buscar las personas a la hora de enmendar su situación económica personal.
Las probabilidades de sacarse la lotería varían dependiendo del tipo de juego y las combinaciones de números que tengan. Pero de manera general, y tomando en cuenta la cantidad de personas que adquieren boletos, la probabilidad media es de 1 en 680,000, es decir 0.0001471%. En otras palabras, es literalmente cuestión de suerte sacarse la lotería.
Saber que existe una ínfima posibilidad de obtener el premio gordo, es algo que salta a la razón e invita a que las personas reconsideren invertir su dinero en algo tan improbable como un juego de azar.
Investigaciones ha revelado que después de cinco años de haber ganado una lotería multimillonaria, el 44% de ganadores se lo gasta todo. Y en poco tiempo, más de la mayoría termina en bancarrota[2]. La razón primaria para esto es que quienes logran sacarse el premio no están preparados(as) para asumir tal cantidad de dinero.
Ya que obtener un premio que por su poca probabilidad de éxito y por la cantidad que devenga, genera un estado de inestabilidad emocional que bloque el sentido de racionalidad de la persona, impidiéndole tomar decisiones certeras.
Además de que dicha inestabilidad se pudiera confundir con alegría y excitación por haber ganado tal premio; tomando en cuenta que la mayoría de personas que acceden a la esperanza de este tipo de juegos, por lo general, son personas de escasos recursos económicos.
Pero esto no solamente aplica al tema de las loterías, también es común ver a jóvenes deportistas que de la noche a la mañana reciben contratos millonarios, o bien personas que logran el estrellato en el mundo del espectáculo y que luego de algunos años se ven en estados tétricos de escasez financiera, en donde no tienen la capacidad de solventar las necesidades más básicas de cualquier ser humano.
En ese tenor, podemos concluir que sacarse la lotería no es la solución a los problemas financieros, y esto por dos razones básicas:
- La improbabilidad de sacarse el premio
- La incapacidad de manejar adecuadamente tal cantidad de recursos.
La pregunta que surge es ¿Si la lotería no es la solución a los problemas financieros, entonces cuál es? La respuesta a esta pregunta reside en una sola palabra: Organización
La problemática financiera parte de un desequilibro entre las entradas y las salidas de dinero. Y tomando en consideración que los ingresos no están sujetos a la voluntad mientras que los egresos sí, entonces se concluye que la organización es la respuesta a los problemas financieros.
En ese sentido, es necesario aplicar una serie de ajustes que permitan re-estabilizar el ritmo de salidas y entradas de manera que se pueda retomar el compás del dinero. Con el fin de que los egresos estén por debajo de los ingresos y que se puedan crear excedentes para el ahorro.
Para ello, la persona debe aplicar el concepto de priorización. En donde define qué es lo importante ahora y qué se puede postergar para después. En otras palabras, diferenciar las necesidades de los gustos. Enfocándolas en el justo orden y así abordarlas de manera adecuada. Con el fin de generar valor en toda la estructura financiera personal.
Más dinero no es la solución. Máxime cuando son montos cuantiosos que exceden las capacidades de quienes los reciben y llegan por sorpresa. En ese sentido, la problemática financiera no se solventa mediante sacarse la lotería, sino partiendo de la organización.
Estableciendo parámetros adecuados de cómo deben manejarse los recursos económicos, y de cómo balancear las salidas en función de las entradas de dinero.
Por lo que, si esta entrada sobre la lotería le ha sido de utilidad le invitamos a que comente y comparta. Sus opiniones y aportes son de gran importancia para esta comunidad y enriquecen el debate. Y si le interesa profundizar en el tema de la organización de las finanzas personales le sugerimos adquirir el libro Arco Iris Financiero: 7 Colores Para Llegar a tu Tesoro escrito por Diego Sosa haciendo clic en la imagen más abajo.
[1] Venta de Loterias en Estados Unidos y Canadá consultado 02/13/16
[2] Artículo Mitos y verdades de ganarse las loterías Consultado 02/14/16