Sinopsis:
Susan Myers era luz y color. Una luz que desafiaba a las sombras de su pasado y una brillante paleta de colores que amenazaba con pintar los matices más oscuros de su vida… Si se lo permitiera.
Tras su fallido compromiso, Josh regresa a Green Bay con la única intención de disipar los rumores que corren en torno a él y la familia Andersen, no obstante, su encuentro con la señorita Myers, provocará que se cuestione sus motivos para contraer nupcias, así como la búsqueda de una esposa que cumpla las expectativas concebidas para tal fin; un matrimonio de conveniencia.
Josh Jenkins era como un rompecabezas que tenía que resolver con perspicacia y paciencia, pieza a pieza, desde la más sencilla a la más compleja…, hasta completarlo.
Susan no esperaba que Jenkins regresara durante el periodo estival, pero no está dispuesta a permitir que su presencia arruine su estancia en Green Bay, a pesar de que, por capricho del destino, sus caminos se crucen una y otra vez... ¿O tal vez no sea obra del destino?
Josh y Susan tienen opiniones enfrentadas respecto al matrimonio, sin embargo, no cuentan con la irresistible atracción que surgirá entre ellos y pondrá en jaque sus vidas.
Opinión personal:
Si tenéis tan mala memoria como la mía, ¡no os preocupéis! Cierto que la pareja se conoce en la entrega anterior «Valle de sueños», pero la buena noticia es que la autora da todas las pistas necesarias para que no nos perdamos nada de la pareja y, aunque como todos, es mucho más gratificante leerlos en orden, se puede leer de forma independiente.
Creo que lo que queda más claro es que los sentimientos de ambos parten desde un punto de vista muy diferente: Susan ya está enamorada y es Josh quien es más reticente a abandonarse a cualquier tipo de sentimiento.
Josh es el personaje más matizado de ambos. El rico hombre de negocios, hecho a sí mismo, un pelín canalla, pero comedido en su comportamiento y, sobre todo, dispuesto a asumir responsabilidades y casarse. Ya ha llegado la hora y ha encontrado una mujer conveniente. Y no es Susan.
Susan es un personaje que me ha gustado mucho. Joven moderna, apartada socialmente por voluntad propia, ya que es nieta de una de las matronas influyentes de la sociedad neoyorquina, pero prefiere centrarse en el mundo del arte y desarrollar su pasión por la pintura que pasearse por los bailes y compartir copas entre las nuevas debutantes.
Uno de los problemas que he encontrado en la novela es la desigualdad entre ambos personajes. Seguramente soy yo, pero al igual que la autora me ha proporcionado muchísima información de ese hombre que, como muchos protagonistas, ha sabido sobrevivir y subir desde lo más bajo hasta lo más alto; me ha faltado mucha información sobre el personaje de ella. Todo queda bastante difuminado y, para mi pesar, me hubiera gustado saber mucho más de las ideas modernas de esta joven, tan claras que ha sabido separar su estatus económico y social en pos de sus verdaderos sueños.
Quizás Josh es un personaje que tengo más leído. Y que conste que no es una queja porque me gustan, pero me he quedado con las ganas de conocer más a Susan.
Su relación me ha parecido encantadora. Conversaciones inteligentes, llenas de pullas en las que ambos se igualan en intelecto. Susan es valiente y no se encoje ante la imagen impactante de Josh y eso es algo que juega en su beneficio porque para él, esa pequeña mujer no solo le intriga, sino que le excita en todos los sentidos. Y ya sabemos que cuando un hombre está acostumbrado a que las mujeres le persigan, alguien con la que pueda medir fuerzas tiene muchos puntos ganados.
Así que solo puedo decir que he disfrutado mucho de esta relación que va forjándose poco a poco -al menos por parte de él, porque lo de ella está claro desde el minuto uno.
La tensión está muy conseguida y la autora juega con ella de una forma estupenda y muy acorde con la época en la que transcurre la historia. Creo que, junto a esos ricos diálogos, es lo que más he disfrutado.
El estilo de la autora, como siempre, es ágil y directo. Con una ambientación muy cuidada y en la que se notan las horas de dedicación para documentarse. Segundo escollo con el que me he encontrado. Sí, siempre digo que lo mejor es que las cosas estén tan entremezcladas que apenas se note, pero aquí, en algunos capítulos creo que se ha perdido la mesura y, de pronto, se sueltan datos —aparte de la conveniente nota de pie de página— y me ha sacado totalmente de la lectura. Tanto, que hacia el final del libro hay un tema muy concreto que no sé de dónde ha salido.
Eso, junto a algún tema en concreto que me ha dado la sensación de que la autora quería poner sí o sí y me queda la sensación de estar un poco forzado. Una pena porque la historia estaba quedando estupenda. Es de esas tramas que cuentan con dos personajes atrayentes y uno de ellos con una historia pasada tan terriblemente dura que es imposible que al final no quede una historia bonita. Quizás se hubiera conseguido el mismo efecto con algunas capítulos menos y un final más hilvanado ya que, como digo, esa parte final me ha sorprendido mucho.
No os quedéis con lo negativo, lo cierto es que es una historia de extensión larga y me ha durado dos sentadas. Y os animo a todas a leerlo. Os encantará Josh y Susan es, sin lugar a dudas, una mujer que sabe estar a la altura. Si me apuráis, quizás la he aplaudido mucho más.
Datos de interés: Ficha de la novela - Ficha de la autora - Web de la autora
Pepa