Michael Costa nació en Napoles el 4 de febrero de 1808. A él, quizás más que a ningún otro hombre, le debemos nuestro actual sistema de dirigir conciertos, y puede decirse en verdad, que él fué el primer gran conductor en Inglaterra. Costa empezó su carrera artística como cantante, pero no satisfecho de la recepción que le hizo el público, dedicó su atención a conducir. Hizo su primera aparición ante un auditorio inglés cuando tenía diecinueve años, dirigiendo una cantata en el Festival de Birmingham. Su ballet, "Kenilworth", fué producido en 1832. Poco después fué nombrado Director Musical en el Teatro de Su Majestad, y produjo más ballets y óperas, entre ellas "Don Carlos". Su manera de dirigir en este Teatro de Su Majestad fué significativa, porque Costa desplegó extraordinaria capacidad en el adiestramiento de la orquesta. En 1846 fué nombrado director de la Banda Filarmónica, puesto que ocupó ocho años.
Dos oratorios, "Eli" (1855) y "Naaman" (1864), fueron sus obras más importantes, estrenadas ambas en Birmingham. La Reina Victoria le confirió el honor de caballero en 1869, y después de esto Sir Michael dirigió los principales festivales de música. A Sir Michael se le definió una vez como un excesivo adorador de la Realeza. Cuando pasaba un miembro de la familia Real, se mantenía de pie con la cabeza descubierta, aunque cayera nieve y no cesara de estornudar furiosamente.
La Sagrada Sociedad Armónica, una de las más famosas organizaciones musicales de Londres, conducida por la batuta de Sir Michael Costa, dio el primer Festival de Handel, en 1857, en el Crystal Palace. Sir Michael Costa murió el 29 de abril de 1884.