Microsoft a la conquista de Android

Una puerta abierta. Eso es Android para Microsoft. La conquista avanza implacable. La incapacidad de Microsoft para mantener y explotar su propio sistema operativo móvil, Windows Phone, le ha llevado irremediablemente a un apasionado romance con el mundo androide.

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Las luces de la conquista

Sentar las bases de este artículo pasa por reconocer qué es Android. Es un sistema operativo presente en millones de dispositivos, incluidos algunos que no imaginarías jamás, que goza de una serie de cualidades que lo convierten en un buen campo de cultivo con muchas posibilidades y que además ha sabido dejar atrás la lacra del mal rendimiento.

Las cualidades son claras: popularidad y versatilidad. Mientras que los sistemas operativos de Apple para dispositivos móviles, iOS y, más recientemente, iPadOS, se muestran inflexibles en cuanto a personalización, Android abre infinitas posibilidades. Por ejemplo, Android permite cambiar el lanzador de aplicaciones, una pieza fundamental de la interfaz de un teléfono.

No se trata de una conquista vacía y fortuita. Realmente los servicios de Microsoft son de muy buena calidad. Y no sólo nos referimos a Office. OneDrive, Outlook, OneNote, Microsoft News… Todos estos servicios tienen unos estándares muy altos de calidad.

Las sombras de la conquista

El gran problema de Microsoft se encuentra en Windows. Microsoft lo sabe y por eso ha presentado nuevos disposición con Android, como el Surface Neo y Duo. La llegada de Windows X también nos deja entrever que los de Redmon son conscientes de que si sistema de escritorio se ha convertido en un lastre.

El futuro de Windows puede ser más incierto de lo que pensamos. Aún hoy en día nos quedamos perplejos cuando leemos que Internet Explorer 2.0 sigue funcionando en Windows 10. Esto nos da una lección de realidad que nos recuerda que el monstruo Windows es demasiado grande.

Resumiendo. El desembarco de Microsoft en Android es muy positivo y lo posiciona como un excelente competidor en servicios digitales. Pero es justo ese éxito el que condena a Windows dejándolo fuera de lugar.

¿Qué opinas del rumbo que ha tomado Microsoft? Deja tu opinión en los comentarios 🙂