micuna transforma las cunas para facilitar el colecho

Con mi primer hijo fui una mamá novata. Quiero decir que hace 8 años no había la información que hay ahora en internet (por eso creé este blog) y la que yo encontraba estaba en libros ("Que se puede esperar cuando se está esperando" era mi manual de cabecera y luego "Un regalo para toda la vida" de Carlos González). El no estar tan informada me benefició en diferentes aspectos: hice lo que me mandó el corazón y el sentido común, sin hacer mucho caso a lo que me decían abuelas, tías y vecinas. Parece que mi corazón fue sabio. La naturaleza lo es. En el caso de la cuna os contaré mi experiencia. Le montamos la habitación a Jorge junto a la nuestra, pero como era tan pequeñito para los primeros meses tuvimos un moisés junto a nuestra cama. Como mi primer parto fue por cesárea para mi era un sacrificio a media noche tener que incorporarme varias veces para darle el pecho. Aún recuerdo el dolor de la cicatriz. En pocos días Jorge acabó durmiendo a mi lado, pero tenía mucho miedo de chafarlo y asfixiarlo (terrores de madre primeriza), así que al final yo no descansaba. Y mi brazo era el único que se dormía con aquella postura tan incómoda. Cuando ya no cabía en la mini cuna casi ni debatimos en pareja el qué íbamos a hacer. Estaba clarísimo que el niño dormiría con nosotros para no tener que ir y volver a su habitación entre 4 y 5 veces por la noche. La lactancia materna nos duró 4 años y ese fue también el tiempo que nuestro peque durmió en nuestra cama. Hubiera dado lo que fuera por una cuna de colecho. Y me refiero a una cuna de medidas estándar (120x60cm) que pudiera acoplarse a mi cama para que Jorge durmiera allí cómodo él y cómoda yo. No encontré ningún producto así en ninguna marca y, además, no todo el mundo respetaba el concepto de crianza con apego, ni la lactancia materna y menos dormir con los hijos. Hoy quiero presentaros la cuna Istar de micuna, que tiene medidas estándar (120x60cm) y se acopla a la cama de los papás gracias a un complemento opcional transformándose en cuna de colecho. Leed más para descubrirla

El 87% de los niños del mundo duerme acompañado. De hecho, las únicas áreas geográficas en las que no se practica el colecho de forma habitual son el sur de Europa, Estados Unidos y Canadá. En el resto del mundo, esta práctica está muy extendida y se realiza con naturalidad. Se estima que en países como Noruega, Suecia o Japón, casi un 90% de las familias duermen con sus bebés de forma habitual. Yo lo he hecho con mis dos hijos y los sigo haciendo. Valentina aparece cada madrugada en mi cama.

El tiempo me ha dado la razón aquí. Se ha demostrado que son muchos los beneficios de dormir junto al bebé. Algunos de ellos los observé en mi práctica pero no estaban documentados. Por ejemplo, el colecho es beneficioso porque los bebés regulan mejor la temperatura, sobre todo cuando están junto al pecho de la madre, la pauta del sueño del peque es más regular y con ella la de la madre, y funciona mejor el sistema inmunitario y la producción de encimas (que intervienen en muchos de los procesos del cuerpo del pequeño). Además, los lactantes junto a sus madres maman más y las que hemos hecho lactancia prolongada (en mi caso llevo 8 años y sigo) sabemos que al final las mamás ni nos enteramos de que están mamando cuando estamos durmiendo. Es algo natural.

En todos estos años he visto en ferias muchas cunas de colecho pero la única opción diferente que he encontrado ha sido la de micuna. Imaginad, ya no tendréis que comprar dos cunas, una para la habitación del niño y otra para la de los padres, o una mini cuna o moisés y después la cuna de medidas estándar. La cuna Istar de micuna, mide 120x60cm (es preciosa) y se acopla a la cama de los papás. Gracias al complemento opcional KIT BE2IN puede transformarse en cuna de colecho. Este kit está formado por un sistema de herrajes y correas, con un montaje muy sencillo, que garantiza la unión de cuna y cama con la mayor seguridad.

micuna ha apostado por este kit (y no simplemente por una cuna colecho) para proporcionar a las familias la mayor usabilidad y durabilidad del producto. Me parece genial que una empresa comprometida como micuna con las familias se preocupe no solo de vender sino de ayudar a los padres. Porque es cierto que cada familia es un mundo y existen casos de papás que quieren colechar durante unos meses, y tras esa etapa, pasar la cuna del bebé a su propia habitación. Con la Istar se puede hacer y no es necesario comprar dos cunas, sino que un mismo producto puede responder a todas nuestras necesidades.

La colección Istar está formada por cuna y bañera, disponible en tres colores: arena, gris y azul. Veréis que lleva una preciosa estrellita que es un aplique de madera con relieve. Por el momento, la colección Istar de la marca es la única que admite este sistema, pero en los próximos meses veremos muchos más modelos de micuna con esta funcionalidad. Ellos son el referente en el sector y seguro que nos sorprenden con muebles preciosos.

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Periodista multidisciplinar de vocación y corazón. Más de 17 años en activo en medios de comunicación. Especializada en social media y contenidos desde 2005. Bloguera y emprendedora. Mamá de dos. La mejor profesión.