Esta serie de carteles del siglo XX reflejan la preocupación de las autoridades por la propagación de determinadas enfermedades infecciosas, intentando advertir a la población sobre su existencia y orientándola sobre las conductas de riesgo. Este primer cartel es de la liga francesa contra las enfermedades venéreas, donde la muerte ve cómo corren la tuberculosis, la sífilis y algo más lejos el cáncer, reflejando la tasa de mortalidad anual. Gráfico. Demasiado delgada la muerte para mi gusto.
Este cartel es del gobierno americano en los años 40, y refleja, sobre una base sanguinolenta, la tasa de infectados que tenían cada año; una mano verde levante una solapa y se ve a la multitud del "pueblo".
En este cartel británico de 1951, un niño proyecta la sombre de un futuro adulto sano, pero la oscuridad, que representan las enfermedades venéreas, le acechan. Reclama que los padres no contagien al nacer a sus hijos. El tratamiento es gratis y confidencial.
Alemania, 1947. El estudio de una posible tuberculosis es un deber del ciudadano. De fondo se ve una flecha que refleja el aumento de casos.
Años 80, Inglaterra. Cartel donde se insiste en que el VIH no se transmite al compartir objetos en el trabajo entre las personas.
Luxemburgo, años 90. El sumum. Un linfocito T cubierto con un preservativo, y la frase lapidaria: "la prudencia es la que debía ser contagiosa"
China, 1935. Como sé que os cuesta traducir el chino de Shangai (salvo a mi amigo Gerardo) lo que dice es que escupir es una mala costumbre, que la gente lo hace repetidamente pese a los esfuerzos del gobierno, y que puede transmitir la tuberculosis si se contacta con esa saliva. Dice que si tienes la costumbre ya arraigada, que lo hagas en un pañuelo y luego lo laves o en un papel y después lo quemes.
USA, 1944, plena guerra mundial. Un soldado está dispuesto a beber de un arroyo y ve reflejada a la de las carreras. O a un familiar de esta, no lo sé bien porque este está al revés y la otra de espaldas.
Yugoslavia, 1950 (para los más jóvenes, era un país). Tienes respuestas si te haces una radiografía. Campaña masiva para detección de tuberculosis.
USA, 1940. Una familia americana, muy juntita, lee un periódico. La masa de gente de la izquierda les puede contagiar la tuberculosis. Si quieres proteger a tu familia, descubre a los que la transmiten.
Shangai, China, 1953. La tuberculosis ocurre por el bacilo y por la debilidad del enfermo.
Dinamarca, 1930. Un señor estornuda y dice " Achis. Así empieza la epidemia".
USA, 1962. Cuando tosas o estornudes, cúbrete con un pañuelo. Elemental, y todavía seguimos reclamándolo...
USA años 30. "Puede ser un saco de problemas". Aunque no lo dice en ningún sitio, una mujer tan maquillada, y fumando en los años 40, ya sabemos a qué querían referirse... para los más torpecillos, han puesto las palabras sífilis y gonorrea. Está claro que la imagen machista de que la mujer es la que transmite las enfermedades venéreas era el pensamiento oficial.
USA, años 40. En contraste este otro cartel. Una chica que "parece limpia", con cara angelical, una "amoalaura", también puede ser fuente de contagio. Un marinero, un militar y un señor con traje la miran.
Años 80, Inglaterra. Escena sexual en la que lo que parece un hombre está entre las piernas de una persona de sexo indeterminado. Descubre el sexo seguro (no VIH, no otras enfermedades, no embarazos no deseados)
En la Martinica en los 90 fueron más originales: "la asociación de ratas, ratones, mosquitos y moscas te dicen: gracias".
1944, USA. Cuando una mosca pone sus patas en la comida, está diseminando una enfermedad. Disney nació allí, no en Mojácar, esta es la prueba.
USA, 1945. Un mosquito, presentado con rasgos japoneses y con la bandera de guerra de Japón por alas, es el causante de la malaria. Tiempos de guerra en el Pacífico
Esta es buena. USA, 1945. Ningún remedio casero ni ningún curandero alguna vez curaron la sífilis ni la gonorrea (se entiende curar por no matar al paciente además). La proliferación de anuncios de charlatanes en la prensa corriente con remedios buenísimos es lo que refleja la figura del hombre de recortes de papel de periódico y fue una causa de la propagación de estas enfermedades en el siglo pasado. Un hematólogo ya jubilado me contó que un compañero suyo, se ponía inyecciones de penicilina cada vez que salía de fiesta. Hay gente para todoEsta colección la podéis ver en
Iconografía del contagio- NLM