Miedo tengo de conocer la verdad

Hoy estoy convocado al Pleno Ordinario del mes de marzo del Ayuntamiento de Ibi. Pero no será a las 19,00 horas, como debería ser habitual, sino a las 12,00 de la mañana (y no me pidan que les explique los motivos del cambio porque los desconozco).
En el Orden del Día hay varios puntos interesantes, como por ejemplo, acordar la Conmemoración del nacimiento de D. Antonio Anguiz Pajarón o la concesión de una Condecoración institucional a D. Luis Satoca Ricart, cuestiones ambas a las que el Grupo Municipal de EUPV-Els Verds votó a favor.
Mucho más polémico será el punto relativo a la Modificación Puntual nº 15.2 del PGOU (la que afecta a los retranqueos de las construcciones a los caminos y a la altura de las vallas). Recordarán que este punto ya figuraba en el Ordel del Día del Pleno del pasado 7 de febrero, pero la Alcaldesa lo retiró por miedo a perder la votación (en ese Pleno Felicidad Peñalver y Rafael Pastor rompieron la disciplina de voto y dejaron a Maite Parra en minoría). El asunto requiere de mayoría absoluta para su aprobación, por lo que todas las miradas estarán puestas en Antonio Granero, ausente en el anterior Pleno y de cuyo voto dependerá la aprobación de este auténtico desaguisado urbanístico.
Y finalmente, en la parte de Control de los Órganos de la Corporación, nos encontramos con una desagradable sorpresa: el Decreto sobre la Liquidación del Presupuesto Municipal del año 2010. ¿Y porqué la califico de "desagradable"? Pues porque una vez más la contabilidad municipal nos arroja un resultado nefasto. Según el Informe del Interventor tenemos que en 2010:
1º) La liquidación de los presupuestos consolidados del Ayuntamiento de Ibi y de las Sociedades Mercantiles dependientes incumple el principio de estabilidad previsto en la Ley (RDL 2/2007, de 28 de diciembre).
2º) Que en la liquidación del presupuesto se ha producido un remanente de tesorería negativo, lo que implica que, conforme a lo establecido en el artículo 193 del R.D.L. 2/2004, que el Pleno de la corporación deberá proceder, en la primera sesión que celebre, a la reducción de gastos del nuevo presupuesto por cuantía igual al déficit producido.
Lo cierto es que la legislatura está llegando a su fin y que a partir del 22 de mayo próximo habrá una nueva Corporación. Auguro desde hace tiempo que los que entren van a tener que lidiar con una coyuntura financiera extremadamente delicada. Por mucho que hemos preguntado, por muchas recomendaciones que haya realizado la Sindicatura de Cuentas, el equipo de gobierno se ha cerrado en banda a la hora de explicar al dedillo cual es la situación real de la Hacienda Municipal.
Opino que uno de los primeros trabajos que debería acometer la nueva Corporación que salga de las urnas, será encargar un Informe que revele la verdadera situación de nuestra economía local. No se podrá seguir escondiendo el polvo debajo de la alfombra. Como ha ocurrido con las Cajas de Ahorro, o con otras instituciones, tarde o temprano tendremos que enfrentarnos al problema generado durante años de despilfarro. Por eso incluyo en el titulo de esta entrada la palabra "miedo".
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